—Charlie, despierta —dijo alguien moviéndome por el hombro. Gruñí y me envolví más en las mantas.
—Déjala, parece muerta —dijo una segunda vos, seguido de un golpe y un quejido.
—Dices puras tonterías —entonces abrí los ojos.
No era Tessa ¿cómo entraban a mi habitación? salí de debajo de las mantas, echando mi desastrosa melena hacía atrás.
—¿Me pueden decir como entraron y por que entraron a mi habitación? —pregunte con voz ronca.
—Tessa, nos dejo pasar —golpee mi frente con una mano. Seguro tenía una copia de mi llave. La pregunta era ¿como la había conseguido?
—¿Y qué hacen aquí? —pregunte aun, en la bruma del sueño.
—Vienen a recogernos, en una hora y como no te vimos en el desayuno, supusimos, que te habías quedado dormida —dijo Cameron y yo volví a hacer palm face.
Mierda, lo había olvidado.
—Diablos —refunfuñe.
—Si sigues así, mataras tu neuronas —refunfuño Keith.
—¿Así mataste tu a las tuyas? —solté.
Joder, si estaba cabreadísima con él. Más que eso celosa y era temprano, no había dormido nada y eso sacaba mi lado borde.
Uys, ni lo notamos.
Cameron nos miro a ambos. Le lance una mirada a Keith, antes de dirigirme a Cameron.
—¿Me dan unos minutos para arreglarme y hacer mi maleta?
—Claro, pero apresúrate —asentí y me levante tan deprisa, que no me percate que aun seguía envuelta en las mantas, por lo que me enrede en estas y caí de bruces, sin que ninguno de los dos chicos pudiese hacer nada.
Charlie, pasando vergüenzas desde tiempos inmemorable.
En serio comenzaba a pensar que la vida me odiaba. Joder, que había dolido. ¿Se podía ser más torpe? ni respondan.
—¿Siempre eres tan torpe? —pregunto Keith con una sonrisita, mientras Cam me ayudaba a levantarme.
—¿Siempre eres tan idiota? ya hasta parece un problema de fabrica —el rio y me miro de arriba a abajo.
—Que pijama mas sexi —dijo mientras acomodaba mi pijama de brandy y el sr bigotes. Sentí mis mejillas enrojecer.
—Tú en serio eres un idiota —solté.
—A este idiota, le gusta lo que ve —soltó.
Ay madres. Mis mejillas se encendieron como farolito y fruncí el ceño.
Ahora sí que lo mato. Cameron le dio un manotazo y Keith se quejo, para después lanzarle una mirada.
—No te pases Keith —dijo Cameron y luego me miro— te esperaremos afuera —su gesto fue serio y yo asentí. Tomo a Keith del cuello de su sudadera, cuando este no tuvo intención de abandonar la habitación.
Mire a mí alrededor. Genial ni siquiera había hecho mi maleta. Corrí al baño y después de veinticinco minutos y un tiempo record, estaba lista. Me había colocado un pantalón negro tallo alto, una sudadera negra y una chaqueta de mezclilla y unas botas de paseo, el frio no menguaba.
Ni lo haría.
Estas en lo correcto.
Solté mi cabello y corrí al armario por mi maleta ¿cómo hacer una maleta en cinco minutos? youtube no me falles. Tome todo lo necesario y lo tire en ella incluyendo zapatos ¿el problema? no podía cerrarla. ¿La solución? subirme a ella ¿el nuevo problema? que mas pesaba un zapato que yo. Llamaron a la puerta y yo los deje entrar, sin bajarme de la maleta.
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Amanecer En Colores
Teen FictionUna chica, dos chicos y un internado, son la ecuación perfecta para un sin fin de problemas. Dos chicos, que se niegan a quererse. Charlie, intenta evitarlo. Keith, intenta evitarlo. ¿Y qué pasa cuando la una gota de lluvia colisiona con un rayo de...