Anti-Cupido

CAP 18●

Go

REECE MÜLLER

Entro a mi habitación con la excitación a mil, pero no debo apresurarme y cometer errores inútiles, por más tentador que sea su cuerpo debo actuar profesionalmente, no debo involucrarme más de la cuenta , ES , SOLO , TRABAJO pero... ¿Por qué me resulta tan complicado ?

Me adentro en la ducha intentando calmar la erección que amenazaba con reventar. Abro el grifo dejando que el agua fría caiga sobre mí para tratar de calmarme pero los suaves gemidos, la suavidad de su piel, sus pechos llenos, el sudor que recorría su cuerpo , el vaivén de sus caderas sobre mí, lo delicioso y apretado que se sentían en mis dedos dentro de ella me llevaron a tomar y masajear el tallo de mi miembro . Más imágenes pasaron como una película erótica por mi mente hasta hacerme derramar. Mierda.

Termino de lavarme y salgo chorreando agua por todas partes mientras  paso las manos por mi cabello con frustración, todo esto podría resolverse fácil pero aún no era el momento y eso me estaba matando.

Agarro una toalla del armario y me la cuelgo de las caderas mientras me recuesto en mi cama, recojo mi teléfono de la mesita de noche y entro al contacto de mi hermano tocándole en el ícono de llamar.

Necesitaba que cambiara de parecer, no necesitaba a nadie siguiendo mis movimientos y que estuviese metido en los pantalones del mejor amigo de Rosse me complicaba demasiado las cosas. Ella era demasiado inteligente, solo le tomaría unos días atar cabos y llegar a la conclusión de que algo no encajaba.

–Tienes 120 días para cumplir tu misión. — alza la voz desde el otro lado de la pantalla haciéndome voltear los ojos – Si en 4 meses la misión encomendada por Cecilia no está completa, tu querido y amado hermano tendrá que concluirlo. 
  
– Es muy poco tiempo...
  
–¿Muy poco tiempo? – me interrumpe – Parece que tu vida de colegiala te gusta mucho, ya llevas 2 meses de 0 avances ¿Tan difícil se te hace enamorar una puta cría de 17 años?

No podía refutar , tenía toda la razón y eso me cabreaba aún más
 
–¿Qué? Ahora me vas a salir con alguna mierda de: "Yo enamoré a su mejor amigo en horas". No seas idiota, será muy receptivo y lo que quieras pero con cosas relacionadas a ella es un incordio.

Normalmente Justin y yo apenas cruzábamos palabra , pero podía notar como se tensaba cuando otro chico se acercaba a ella , la manera en que se comportaba cuando yo estaba , no era imbécil.

– ¿Ya te acostaste con ella? – me quedo en silencio y estalla una carcajada – No me lo puedo creer.. al profesional en seducción se le está haciendo difícil, a Cecilia no le va a gustar nada esto Reece – La advertencia estaba latente detrás su la risa .

-Solo lárgate de una vez y no te entrometas más en mi camino. Déjame hacer mi jodido trabajo.

– Sabes lo importante que es esta misión, no me iré sabiendo que puedes estropearlo todo . No sé que te pasa con esa chica pero sea lo que sea supéralo Reece , eres un profesional,  actúa como tal.

Golpeo  la cama en cuanto cuelga , si en algo tenía razón era en que el tiempo no estaba a mi favor,   cada hora, minuto y segundo contaba.

Tal vez sea hoy, mañana o quizás en 10 años pero el trastorno que sufre Rosse podría aparecer y estropearlo todo. Por eso debo terminar con esto lo antes posible, y como profesional que soy,  no tendré inconvenientes. Mientras mantuviese a Rosse alejada del maldito radar de Henrick no había porque preocuparse.

(...)

La luz de el sol que entra por lo grandes ventanales hace que mis ojos se abran mirando el reloj , son las 7 de la mañana y la pantalla del teléfono se ilumina con la llamada de la madre de Rosse, habló con ella sobre temas banales y al pasar unos minutos me despido.
 
No fue tan difícil para Cecilia conseguir mudarme a esta casa durante el supuesto "Intercambio", solo con un fajo de billetes logró convencer a los amigos de su madre para decir que tenían un hijo y que necesitaba un hospedaje para terminar el curso en Estados Unidos, ella calló redondita y habló con su marido para que aceptara que me quedara aquí a vivir con una  condición, mantener a Rosse alejada de hombres problemáticos que afectasen el futuro que tenían planeado para ella.

Lo que no sabían ellos es que el mayor problema para su hija en estos momentos era yo, para ser virgen Rosse tenía una chispa que te obligaba a mirarla de pies a cabeza aunque llevase un saco de patatas.

Al costo que fuese en los próximos meses Rosse iba a terminar enamorada de mi , mientras no apareciesen imbéciles a interponerse era pan comido. Porque si alguien se atrevía a oponerse a mis deseos o meterse en mi camino no dudaré en destruirlo.