Ursula, la niña extraña

¿Qué está pasando?

-Ursula...-Dije observandola.

Álex se giró pero él no veía nada.

-Ursula...¿Qué te ocurre?-Dije asustada.

Ella vino con una rapidez increíble y me agarró del cuello violentamente haciendo que me asfixiara.

-¡Lucía!-Gritaba Álex.-¡¿Qué te pasa?!

No podía hablar, Ursula había cambiado, no podía respirar y lo ví todo borroso. Noté que me caí al suelo y pude distinguir a alguien, era Álex. Estaba a mi lado y lo escuchaba hablar, pero no podía moverme. Ví que Álex gritó y lo vi volar por los aires hasta chocarse con una estantería fuertemente. Intentaba hablar pero no podía, mi respiración se agotaba, hasta que todo quedó completamente en negro...

Abrí los ojos lentamente, intentaba moverme pero era inútil. No sentía mis piernas, las tenía completamente inmóvil. Intentaba hablar, pero no me funcionaba la voz. ¿Qué estaba pasando? Noté un leve cosquilleo en las piernas, intenté moverlas pero las movía muy lento. Apoyé los brazos sobre el suelo, mis brazos temblaban demasiado pero logré alcanzar una mesa para ponerme en pie. Mi respiración estana agitada y no controlaba bien los músculos.

-A...Álex-Susurré ya que no podía hablar bien.

Iba apoyándome en todas las cosas que encontraba y tomé el teléfono que había en una mesa. Marqué el número de mi madre e intenté hablar.

-¿Lucía?-Dijo mi madre tras el teléfono.

-Ma...Mamá-Susurré.

-¿Estás bien?

Me quedé sin aire y caí al suelo.