Me desperté por el despertador.
-¿que? ¿tienes que ir al instituto? Si tienes vacaciones.-Dijo Cris medio dormida.
-Lo sé, se me olvidó de quitar la alarma.-Dije con una ligera risa.
Apagué la alarma y me dormí de nuevo, cuando algo me despertó de nuevo, era un ruido.
-Cris dejame tengo sueño...-Dije sin abrir los ojos aún.
Cris no respondía y abrí los ojos, el ruido seguía, otra vez, arañazos de bajo de mi cama.
-Cris...-Dije asustadá esperando su respuesta.
-Dime.
Al escuchar su voz me relaje y los arañazos disminuían, no se escuchaban mucho pero si pones atención si.
-¿escuchas eso?-Le pregunté esperando un si.
-¿Que droga tomas?-Me preguntó sarcasticamente.
-No estoy de coña-le dije mientras los arañazos pararon -¿no lo has escuchado?
-Sigue durmiendo Lucía...
Me levanté de la cama y me fui a desayunar, Cris seguía en su cama.
Al llegar al comedor me encontré a mi madre preparando el desayuno.
-Mmm...Tostadas con mermelada y...¿eso es fruta?-Le dije con una cara extraña. No me gusta mucho la fruta y mas si es para desayunar.
-Si, vas a tener que cojer energías para este día.-Dijo Lucas viniendo a la cocina con cara contenta.
-¿que me he perdido?-Pregunté probando las tostadas.
-Hija vamos a ir a la montaña a hacer una excursión, cuando se levanté tu padre iremos.
-Vale.-Asentí sin ganas.
Hoy no tenía ganas de nada solo de estar en casa, pero tenía que ir. Cojí ropa nueva y me fui a duchar. Mientras esperaba a que el agua estuviera caliente, recordé aquellas letras en mi espejo, me asustó al volverlo a recordar...Me metí en la ducha y me duché.
Me vestí con una camiseta de un creeper de minecraft verde ya que me encantaba ese juego, unos shorts negros y unas vans verdes hicieron el conjunto del día de hoy.
Salí de la ducha dirigiendome a mi habitación.
-Buenos días dormilona.-Le dije a Cris mientras preparaba una pequeña mochila con agua, unos bocadillos y mi móvil para la excursión de hoy.
-¿que hora es?-Me preguntó mientras se estiraba bostezando.
-La hora de salir a la montaña de excursión.
-¿¡Que!?-Dijo levantandose de golpe.
Ella se dirigió a la cocina a desayunar mientras yo fuí a jugar a la Xbox un rato.
-Venga nos vamos-Dijo mi padre preparado a lo deportista.
-Voy...Oye papa-Dije riendo- que tampoco vamos a ir a escalar una montaña gigante.
-Claro que vamos, ya te estas cambiando esas bambas por unas deportivas.-Dijo mientras cerró mi puerta y se iva.
Bueno, tenía que cambiarme las bambas y nos ivamos. Apagué la Xbox, me canvié mis vans por unas deportivas y nos dirigimos todos a una excursión.
*3 minutos después*-Dios mio que cansancio-Dije yo cansada.
-Ni si quiera hemos llegado a la montaña-Dijo mi padre con un ritmo más rápido que el mio.
Ni habíamos llegado a la montaña y ya estaba cansada.
******
-Por fin...-Dijo Lucas alzando sus brazos como victoria.
Ya estaba muerta se cansancio, escalemos una montaña ENORME dios mio.
Después de pasar el día allí y comer unos bocadillos que preparemos nos dirigimos a casa.
-¿Sabes que han abierto una tienda nueva al lado de casa?-Dijo mi hermano Lucas contento.
-Bah, yo no voy.-Dije sin importancia.
-Es se videojue...-Lucas no pudo acabar la frase ya que le interrumpí.
-¡VAMOS!-dije decidida.
Antes de ir a la nueva tienda de videojuegos me duché y me vestí.
-Vamos-Les dije a Lucas y Cris.
-¡Si!-Dijieron al unisono.
Al llegar allí era todo super chulo, era un GameStore enorme, eso me encantaba.
-¿Lucía ese no es tu novio?-Dijo Lucas señalando a un chico.
-¿Que? No tengo novio.-Le dije mientras dejaba de ver un juego.
-¿tienes novio?-Dijo Crís enfadada-¿Y no me lo dices?
-Que ese no es mi novio-Le dije mientras buscaba a quien aseñaló Lucas-ese es...Álex.-Dije soltando una ligera risa.
Me dirigí a Álex y le saludé, nos pusimos a jugar al COD en una Xbox mientras Cris me miraba rara.
-Vaya, eres buena-Me dijo mientras me miraba con una sonrisa.
-Tú también-Le dije devolviendole la sonrisa.
Nos despedimos y yo me fui a casa con Cris y Lucas.
-Con que no es tu novio ¿eh?-Me dijo Cris con cara picara.
-Que no, solo es un amigo.
-Pos es muy guapo-Dijo Cris mirandome.
-¡Eh! No lo mires mucho-Le dije riendonos las dos.
Llegamos a casa los tres y tenía unas ganas tremendas de echarme al sofa para relajarme y eso hice. Todos se fueron a dormir menos yo, me quedé viendo la televisón cuando escuché un ruido, provenía de la cocina. Allí no habia nadie ya que todos dormían. Así que me dirigí a ver que era...Los ruidos aumentaban cada vez que me acercaba más. Se escuchaban cosas caerse y romperse así que fui a ver que era...
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Ursula, la niña extraña
ParanormaleLucía es una niña de 15 años dónde se va a Los Ángeles a vivir con su abuela por problemas familiares, en aquella casa ocurren echos paranormales y Lucía piensa averiguar de que va todo esto.