Capítulo 6 🖇

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Se supone que a partir de ese momento la única relación que Yeonjun tendría con Soobin era estrictamente profesional hasta que terminaran la clínica. Entonces, ¿qué eran esas ganas de no querer soltarlo en la mañana? Debía ir a su oficina a buscar algunas cosas y además debía ir a casa de sus padres. Irse de allí era lo más sensato.

Vio los labios ligeramente abiertos del menor y sus ganas de despertarlo con un beso iban en incremento. "Lo hubieras hecho hace años cuando realmente era necesario", se reprochó a sí mismo y salió con cuidado de la cama deshaciéndose del abrazo que había formado con Soobin en medio del sueño.

Se vistió y tomó sus cosas para salir de allí. Una vez fuera suspiró y miró hacia arriba pestañeando varias veces como intentando tragarse las lágrimas que amenazaban con salir. Porque era difícil dejarlo ir cuando estaba tan atado a él que sentía que era indispensable.

No recordaba un momento de su vida en el que Soobin no haya sido parte porque estuvo ahí siendo de sus pocos amigos a pesar de la diferencia de edad siempre estuvieron juntos. Soobin lo apoyaba y él lo cuidaba. Cuando crecieron y el menor le confesó sus sentimientos sintió que su vida era perfecta porque a él Soobin le gustaba desde hacía mucho tiempo, pero no lo dijo por miedo. Aguardó a que Soobin fuese mayor de edad y lo amó cada día que estuvieron juntos, incluso lo amó cuando se separaron, pero el amor no lo podía todo.

El amor no lo detuvo de hacerle daño ni de romperle el corazón a alguien que se lo había confiado por completo.

Luego de pasar por la oficina fue a su propio lugar para darse una ducha y ponerse algo más cómodo para el día. Condujo hasta la casa familiar y caminó directamente hasta el salón donde ya estaban su hermano menor y sus padres conversando.

— ¡Yeonjun, pensé que ya no vendrías!— fue la bienvenida que le dio su madre.

— Es domingo en la mañana, ¿qué otros planes haría? — habló tomando asiento en un sofá individual.

— Yo estuve a punto de quedarme en mi casa porque sigo agotado por lo Soobin hyung,— escuchó decir a su hermano.

— No hemos podido felicitar a Soobin,— dijo el señor Choi.— Deberíamos llamarlo e invitarlo a desayunar. 

— Papá,— llamó con advertencia Beomgyu.

— De seguro va a desayunar con sus padres, papá,— intervino Yeonjun antes de que sus padres cometieran una locura.

— No lo creo, su madre me dijo que no los visita muy a menudo,— dijo la señora Choi.

— Me está llamando mi amor, vuelvo en seguida.— Beomgyu huyó del salón con el teléfono en mano.

Vio como su padre puso cara de molestia al escuchar a su hijo menor. Delante de él no lo demostraba, pero Yeonjun sabía que su padre no estaba muy de acuerdo con la relación de Taehyun y Beomgyu. Él al principio era igual, pero cuando conoció al actual novio de su hermano supo que a quien debía cuidar era a él porque Beomgyu era una bomba de movimiento y emociones al lado de ese tranquilo chico.

— Deberíamos invitar a Kang Taehyun para comer con nosotros, ¿no creen?— sugirió Yeonjun.

— Sí, lo he estado pensando,— afirmó su madre.

— Es muy pronto, no llevan tanto saliendo y nada asegura que sea algo serio.

— ¿En serio papá? Nunca había visto a Gyunie andar tan en serio con alguien, se aman y eso se nota.

Escuchó a su padre bufar resignado y supo que no tenía más argumento.

Cuando volvió el menor todos fueron al comedor para tomar juntos el desayuno. Era una tradición familiar que se habían inventado sus padres. Como ellos eran empresarios y no solían estar en casa mucho tiempo se les ocurrió que todos los domingos en la mañana sería desayuno familiar y hacían todo lo posible por estar en casa ese día y comer con sus dos hijos.

Agradecía mucho que sus padres hayan hecho algo como eso porque no se sentía tan abandonado por ellos. Aunque claro, no todo era color de rosas y cuando necesitaba ayuda solía guardarlo para sí mismo con tal de no molestar a sus padres o de arruinar el desayuno familiar. Cuidó de Beomgyu y lo protegió todo lo que pudo y se encargó de crecer como un chico fuerte e inteligente que sería el orgullo de sus padres.

Con el pasar de los años heredó la misma costumbre. Esa de encerrarse en el estudio o trabajo todos los días y compensarle con uno a las personas que quería. Eso le costó mucha de su estabilidad emocional, ansiedad y otras cosas más que lograba controlar cuando Soobin estaba a su lado.

Ahora debía hacerlo solo.

— Papá, mamá, creo que no pasaré la Navidad aquí,— anunció de repente Beomgyu dejando a todos estupefactos.

— ¿El pobre Kang tendrá que soportarte también en Navidad?— se burló Yeonjun.

Beomgyu le sacó la lengua y luego le dijo: — Pues para tu información, Tyunie fue el que propuso el plan.

— No puedes,— se negó su padre.

— ¡Pero papá! Es nuestra primera Navidad juntos, no pasa nada si estoy un año en otro lugar.

— Ya he dicho que no puedes.

Beomgyu bufó enojado y echó el plato hacia adelante. Yeonjun notó que su sensible hermano estaba a punto de llorar y su madre siguió comiendo tranquilamente quizás evitando meterse en la pelea que se había creado. Oyó como el menor hizo atrás las silla y salió casi corriendo del área de comedor. Él le siguió y lo atrapó casi en la puerta para salir de la casa.

— Gyunie, espera,— dijo para parar al menor.

— Déjame hyung, no estoy enojado contigo así que no tienes que hacer esto más.

— ¿Qué dices Beomgyu? Solo intento calmarte, si sales así puedes tener un accidente.— Le miró con ojos suplicante y el menor dejó de intentar safarse del agarre.

— No tienes que hacer esto hyung, no tienes que cubrir sus faltas. Eres mi hermano mayor, no mi otro padre. Ellos tienen que darse cuenta de sus errores. Basta de protegerme porque nadie te protege a ti.

En los veintidós años de vida Beomgyu nunca le había hablado de esa forma. Nunca se dio cuenta de que cubría los errores de sus padres, él solo quería que su hermanito estuviese bien.

— Está bien, solo cálmate un poco antes de salir. No los voy a justificar, esta vez no,— prometió.

— Taehyun y yo hemos pasado por muchas cosas y ha demostrado que me ama, ¿creen que no me doy cuenta de que papá no lo aprecia? Ni siquiera quiero traerlo aquí para que no se vuelva a sentir presionado. Soy un adulto, Yeonjun hyung, yo decidí amarlo y eso implica muchas cosas como que ahora tengo más prioridades y una de ellas es mi relación. No dejaré que se metan en algo que no es de ellos. Por primera vez en mi vida esto es mío y de la persona que escogí.

— Lo sé, Gyunie, lo sé,— consoló en un abrazo a su sollozante hermano y le dio un beso en la frente.

Estaba orgulloso de Beomgyu por cuidar su amor y no dejar que nadie se metiera en él. Su hermano había hecho lo que él no, obviar a todos y concentrarse en la persona a la que le había prometido amar y cuidar. Por eso no justificó a sus padres y se permitió ser solo el hermano mayor que prestaba su hombro para que el otro descansara.

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La hermandad de Beomgyu y Yeonjun es una de las más bonitas del mundo. Igual en txt es de las que más soy protectora porque, ¿han visto el live del cumpleaños pasado de Yeonjun? ¿Cómo mira a Beomgyu quien le quitó su silla y empezó a cantar cumpleaños feliz? Si eso no es amor puro y familiar yo no sé qué es.

*c va llorando

Por cierto, pendiente al nivel de traumas que tiene Yeonjun y como los va reconociendo porque tienen mucho que ver con su historia pasada con Soobin y con la razón por la que tiene esa actitud ahora.

¡Moatori se despide! ♡

Ese Alguien | YeonbinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora