Capitulo 10 El reino de los espectros

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Cuándo Sander apareció en el suelo desconocido, Kosair ya estaba esperándolo de pie junto al pozo de agua estancada que los escupió.

El pequeño forestal fue empujado por la propia fuerza del portal hacia unas piedras que rodeaban el mismo, salvándose apenas de romperse la nariz gracias a la mano de su hermano, que lo sostuvo por la parte de atrás del cuello de su túnica, jalándolo hacia sí.

Fue en ese momento en el que Sander se abalanzó hacia su hermano para abrazarlo, ignorando los quejidos de dolor de este.

- pensé que te perdería, no sabes lo feliz que me hace que sigas con vida Kosair.

El mayor sonrío adolorido, ciertamente pudo haber estirado la pata.

- no te emociones tanto, pues sino como algo te aseguro que moriré, ¡muero de hambre!

Sander estalló en una carcajada negando con la cabeza.

- lambucio

Las piernas de Kosair aún temblaban por el dolor, era un milagro que el chico siguiera en pie todavía, aun así el chico se dirigió a los dos elfos del fuego.

Joas estaba de rodillas en el suelo con la cabeza de Velita sobre sus piernas, la chica se había desmayado. La falta de alimento había debilitado tanto su cuerpo que no aguanto el viaje.

En ese momento Sander miro detalladamente a su hermano, su cuerpo estaba cubierto de heridas y sangre seca, sus ojos se veían vidriosos y su cuerpo temblaba.

Fue entonces cuando el chico empezó a darse cuenta de que probablemente ninguno de los dos había comido en días.

Aparte de eso, el cuerpo de ambos se veía con signos grandes de torturas.

El joven reaccionó a los pocos segundos y empezó a buscar provisiones en su macuto, mientras tanto Kosair tomo el cuerpo de la chica y lo recostó en sus propias piernas.

- ve el perímetro, asegúrate de saber que no estamos en una zona hostil e infórmame lo que encuentres.

Le dijo el joven al hombre de ojos de fuego que respondió con una mueca.

El hombre no quería soltar a su hija Y tampoco le agradaba la idea de seguir órdenes de ese chico.

- Eres el más fuerte de los cuatro en este momento, necesito saber en donde y con quien nos encontramos, en caso de no nos encontremos en un lugar pacífico tú pareces poder defenderte, de igual manera si tienes una mejor idea la escucho.

Joas apretó los labios mientras fruncía el ceño, aun así se limitó a seguir la orden al ver los ojos de Kosair, la determinación y el valor que reflejaba su mirada le brindaban la seguridad que necesitaba en esa situación tan confusa, su plan era razonable.

Sander miro a su hermano mientras les tendía una manzana y un par de panecillos dulces, ¿era impresión suya o el chico frente a él estaba cuidando a Nurbanu? ¿Qué había pasado entre esos dos para que el testarudo de su hermano se preocupara por alguien?

Kosair mientras tanto mordió la manzana que tenía con desesperación, las tripas le resonaban.

Pasaron un par de minutos antes de que el forestal terminara de comer y Joas volviera.

- todo aquí está muerto, no hay ni plantas ni animales, tampoco ningún habitante aparente. Solo hay pequeñas luces flotando en el aire.

En ese momento Nurbanu recupero el conocimiento llamando la atención del forestal.

- Yo pensaba que ya se te había acabado la mecha Velita.

Antes de que la chica pudiera responder ya su padre estaba sujetándola por los hombros para colocarla en su regazo y verificar su estado.

El loco de los mil mundos (18+)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora