El pasadizo se encontraba más allá de las tierras de Zaun, bajando por las antiguas minas continuas que habían sido cerradas años antes de que los padres de Vi nacieran. Piedras caídas cubrían la entrada y el silencio abrumador le daba un ambiente fantasmagórico a aquella tumba de mineros del siglo anterior, Vi hubiese preferido mantenerse alejada de todo aquello, pero sabía que no podía.
Sylas lideró el camino, usando su magia para encender tres antorchas, cada uno tomó una, avanzando por los túneles, sintiendo el eco de sus pasos mezclarse con el sonido de la humedad de las minas. Los caminos estaban marcados por pasos de antaño y la oscuridad espesa apenas se diseminaba con el fuego, el aire era difícil de respirar y el olor putrefacto los ahogaba ligeramente, pero eso no los detuvo.
El cansancio melló sus cuerpos, los zapatos hicieron ampollas sobre los callos y el dolor atacó sus músculos, pero no se detuvieron. Respirar se volvió una tarea casi imposible cuando el camino descendió por debajo del nivel del río que dividía Piltover y Zaun, hacía años Vander le había explicado a Vi que ese río no existía y todo era una sola tierra, pero cuando la guerra empezó y la cacería hacia los magos se desató, muchas medidas nuevas fueron tomadas, entre ellas se encontró la creación del río, sellando las antiguar minas y dividiendo la Ciudad alta de la baja. Los puentes se crearon años después, cuando Piltover alcanzó su fama como la Ciudad del progreso.
Vi entrecerró los párpados cuando la luz natural de la luna, mezclada con las luces artificiales de Piltover, hirió sus ojos. Habían pasado demasiadas horas bajo la tierra, respirar el aire limpio de Piltover se sintió casi como salir del agua después de haberse estado ahogando. Vi miró en derredor, notando la tranquilidad de la calle. El túnel los había dejado en una de las áreas pobres de Piltover, si se podían llamar así: era una zona casi deshabitada que se usaba para la eliminación de los residuos y la suciedad de aquella ciudad dorada.
«Ojalá pudieran eliminar así la podredumbre que los carcome».
Sylas conocía la ciudad a medias, pero Vi ya había vagado por aquellas calles anteriormente, así que en esa ocasión fue su turno de liderar. Avanzaron por los callejones, escondiéndose entre las áreas oscuras y las casas, hasta que el área pobre fue dejada atrás, entonces tuvieron que escalar los edificios, saltando por los tejados a una velocidad vertiginosa, con el constante cuidado de que nadie los viera.
Zeri se encargaba de vigilar el cielo, Sylas observaba el suelo y Vi era quien saltaba de primera, asegurándose que fuera seguro para los otros dos seguirla. Tardaron tres horas en alcanzar la zona alta de Piltover, el sigilo con el que se habían movido los había atrasado considerablemente, pero el verdadero problema se presentó al notar a los guardias que custodiaban la mansión Kiramman.
—¿Cómo haremos para entrar sin que nos noten y no llamar la atención? —preguntó Zeri, observando a los cuatro guardias en perfectas posiciones que no se alejaban de su puesto.
—Causando una distracción —dijo Vi, mirando en derredor en busca de algo que pudiera ayudarlos. Observó a la distancia la torre de una de las centrales de ricos, probablemente pertenecería a alguna familia ricachona y poderosa, pero a esa hora de la noche todas sus luces estaban apagadas y no debían de haber personas dentro.
—Yo iré —afirmó Zeri, notando el plan que iba formándose en la mente de Vi.
—Ten cuidado, yo exploté una cuando era adolescente y el precio fue muy alto —comentó Vi, agachándose totalmente en el tejado al lado de Sylas y viendo a Zeri saltar por la parte trasera, cayendo al suelo dos casas más allá y perdiéndose de su vista.
—Cuando el edificio explote, yo iré al otro lado de la ciudad, explotaré algo por allá para desviarlos, no podremos movernos cuando salga el sol, así que todos tendremos que regresar y escondernos en esa casa durante el día —explicó Sylas entre susurros, viendo a Vi asentir quedamente—. ¿Tu suegro nos recibirá?
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Arcane: El renacimiento.
FanfictionPiltover y Zaun colapsan en desgracia después de la explosión causada por Jinx, haciendo que Caitlyn y Vi se vean atascadas en medio del dolor y las responsabilidades. Con un reloj contando el tiempo que les queda juntas antes de que ambas naciones...