Pov: Alexander
Hacía un rato que había llegado a la fiesta y ya llevaba unas cuantas copas encima. Una chica se me había acercado y se sentó encima de mis piernas y no nos parábamos de besar y tocar.
- ¿Porqué no nos vamos a un lugar más privado?- le pregunté, mientras seguía tocándole el culo.
- Está bien, pero primero déjame ir al baño.
- Ok, nena.- le digo, a lo que está me sonríe dándose la vuelta en dirección a los baños y moviendo las caderas de manera provocativa.
La verdad es que la chica tenía buen cuerpo. Rubia de metro setenta, plana de todo por delante pero luego por detrás con un buen culo. A ella la volvía loca que la llamasen "nena", como a todas.
Mientras me seguía imaginando como sería acostarme con la rubia, me gire hacia mis hermanos y me fije en que solo estaban Asher y Edward. A saber con quien estará montándoselo Andrew... Pero mis dos hermanos no paraban de mirar hacia la pista así que les dije
- Tanto dramatismo por que venga, para que ahora estéis los dos embobados mirando hacia la pista.
- Hermano...- me dijo un Andrew muy embobado.
- ¿Qué?
- Mira hacia el centro de la pista.
Entonces gire la cabeza y haciendo un recorrido por toda la pista de baile, mi atención la capto una chica que estaba bailando pegada un hombre y no paraba de movérsele provocativamente, y el otro encantado le tocaba el culo. Tarde un poco en darme cuenta quienes eran y porque mis hermanos hacían tanto dramatismo, si cientos de chicas siempre hacían eso. Hasta que la chica se dio la vuelta en nuestra dirección y empezó a restregar su cuerpo contra la entrepierna del hombre, y ahí fue cuando me di cuenta que era ¡Katherine!. Así que hecho una furia me gire hacia mis hermanos y les solte
- ¡Queréis dejar de mirarla de una vez!- y con semejante grito apartaron las miradas.
- Es que... ¡como mueve las caderas tu secretaria...!- me dijo Asher
- ¡Al final voy a darte!
- ¡Pero si yo no soy el que la está tocando y besando!- me dijo Asher indignado, volviendo a mirar hacia la pista. ¿¡Por qué dijo besando!? Así que vuelvo a girar la cabeza y me fijo en que ese hijo de puta le ha dado la vuelta y ahora la está besando, ¡y ella se deja!
Así que me levanto del sillón dispuesto a ir a matar ese hijo de puta, cuando se me interpone por el camino la rubia de antes.
- ¿Nos vamos ya, cariño?
- ¡No, fuera de mi vista!- le grito, haciendo que se asuste y marche corriendo.
Bajo las escaleras de los palcos y me voy en dirección a ellos, cuando estoy a su lado me fijo en que él le dice muy acarameladito.
- Nena, porque no nos vamos para que lo pasemos mejor...
- Si...- ¡Una mierda!
Y cuando el muy cabrón intenta volver a besarla, lo alejo de Katherine agarrándolo por el cuello de la camisa y sin soltarlo le pego un puñetazo que lo deja Ko en el suelo.
- ¡Se puede saber que...!, ¿¡Alexander!?- me grita desconcertada Katherine reconociéndome.
Al ver que se ha quedado confundida me acerco a ella y agachándome la cojo de las piernas y la subo a mi hombro. Esta empieza a gritar pidiendo que la baje y captando la atención de todo el mundo.
- ¡Alexander!, ¡Se puede saber que coño haces!- así que la ignoro y me dirijo hacia la salida.
Estamos ya en la calle y empiezo a buscar por donde Harry me dijo que me estaría esperando. Pero la loca no deja de retorcerse como una serpiente y gritar
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El destino que nos une [+18]
RomanceAlexander Spencer. Frío, calculador y mujeriego. Él es uno de los hombres más poderosos e influyentes de Inglaterra. Experto amante pero despiadado en los negocios. Katherine Walker, una mujer hermosa, independiente y soñadora. La cual no caerá ante...