Una caída=Un beso

1.8K 115 56
                                    

[Steve]

Estaba sentado cerca de la piscina, usaba ropa normal porque no tenía planes de entrar al agua, igual que Robin, quien estaba sentada por un lado de mí, yo le dedicaba miradas ocasionales a la puerta y a mi reloj de mano, eran las cuatro quince.

—El hecho de que veas tanto hacia la puerta no hará que tu _____ aparezca ahí.—Me dijo.

—No estoy viendo a la puerta.—Fingí que no era intencional.

—Tienes qué relajarte, ahorita llega.—Insistió.

—Estoy relajado.

—Claro que no, yo te conozco y sé que estás celoso de Joseph.

—No son celos, pero no me gusta que salga con patanes, temo por su seguridad—Aclaré, y no mentía, sabía que _____ nunca me mentiría o engañaría, pero me daba miedo que su nuevo amigo pudiera resultar peligroso de alguna forma—Y cuando _____ llegue no vayas a decir nada, por favor, no quiero que crea que estoy celoso de Joseph y que le deje de hablar por eso, si es su amigo está bien siempre y cuando no la trate mal.

—Está bien, cuenta con ello.

—¿Todavía está esperando a _____?.—Dustin se sentó a mi lado dirigiéndose a mi amiga.

—Todavía.—Respondió ella.

—No la estoy esperando.—Me defendí, sí la estaba esperando, ya quería que llegara, pero ellos no tenían que saberlo.

—¿Entonces por qué estás tan rojo?.—El castaño se burló.

—Porque hace calor, Henderson.

—Ajá, el calor.

Escuché que tocaron el timbre y me levanté de inmediato a abrir la puerta, cuando empecé a caminar pude oír las risas burlonas de mis dos amigos que se reían de la urgencia con la que me había movido, pero los ignoré esperando que fuera ella quien tocaba, pues de no ser así se burlarían aún más, abrí la puerta principal y ahí me encontré a la chica que ocupaba mi mente todo el tiempo.

—Hola.—Me saludó con voz suave y una sonrisa.

—Hola—Me hice a un lado para dejarla pasar, cuando estuvo dentro de la casa cerré la puerta—Pásate, los chicos están atrás.—Empecé a caminar para guiarla hacia la parte de la casa donde estaban todos los demás, pero ella me detuvo.

—No, espera Steve—Tomó mi mano—Quisiera unos minutos contigo, los dos.

—¿Pasó algo?.—Le pregunté temeroso de que ese tarado la hubiera lastimado de alguna manera.

—Nada malo, tranquilo—Se apresuró a responder—Es que quería darte esto.

Sacó de la bolsa de su pantalón un papelito doblado, tenía un corazón dibujado, me lo entregó y yo lo recibí con una sonrisita.

—¿Es una carta?.—Levanté las cejas.

—Algo así, una carta muy breve.

—¿Y eso?.

—Hace rato me acordé de tí y pensé que sería bueno escribirla.

No le dije nada, desdoblé el papel con lentitud mientras ella me miraba apretando los labios, su nota decía lo siguiente:

"Steve, aunque aún no seamos novios debes saber que eres todo lo que quiero, y si hoy me preguntan cómo es mi chico ideal, sin duda tendría que describirte, sé que escribiremos una gran historia juntos, porque lo que tenemos ahora es sólo el comienzo.

Stupid Cupid [Steve Harrington y tú]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora