capítulo 29 Una tía hecha fiera

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Christopher Vélez

Estamos en la oficina de Will Morgan según la secretaria nos informó que estaba llegando, Payne está buscando evidencia en el lugar, de vez en cuando me da una mirada y sonríe, mientras yo quedo embobado por su sonrisa, siento el vibrar de mi teléfono observo la pantalla y es Zabdi.

-Aquí Vélez ¿sucede algo de Jesús?
-Velez te solicita la tía Payne urgente está hecha un demonio
-Infórmale que se debe esperar porque estoy en pleno procedimiento-digo con una sonrisa maliciosa
-Necesita que le firmes el informe para retrasar la extradición de Jhon Cladella-demonios eso si es urgente
-Dile que me dé una hora estamos esperando que llegue el sospechoso
-MIRA'VÉLEZ, TE DEJAN UN DIA COMO JEFE Y YA TE DESAPARECE, TE DOY SOLO UNA HORA-dice una voz femenina, demonios es la tía Payne-ME ESCUCHASTE VÉLEZ UNA HORA
-Primero hágame el favor y no grite que no estoy sordo, y si quiere se espera y si no lárguese-me tiene harto esta señora
-¿QUE HAS DICHO NIÑITO?-expresa furiosa, y será que Zabdi no le piensa quitar su teléfono
-lo que escucho, ahora páseme a el detective De Jesús-espeto con rabia, Payne me observa con su ceño fruncido
-Está loco papi se ha ido hecha una fiera-dijo con asombro
-Me importa una mierda que se joda, el tribunal puede esperar hasta la seis de la tarde para eso y apenas son las tres de la tarde-digo molesto
-Bueno Vélez tratare de calmarla ahora piensa una muy buena, porque sabes que el jefe se enterara de esto-dice algo nervioso
-Tranquilo ya veré que hago adiós. Cuelgo

Fin de la llamada

-Estás loco Chris porque le dijiste eso a tía Payne. Te odiara toda la vida-habla Payne muy preocupada y molesta a la vez

-Me tiene harto Payne, no la soporto desde que llego busca la manera de molestarme-expreso frustrado, sé que esto me hará ganar una amonestación pero estoy cansado de esa mujer-tranquila veré que hago ahora vamos a apresurarnos para llegar a tiempo

-Está bien igual puedo hablar con ella-habla y mi corazón se emociona al escuchar eso, no porque quiera salvarme si no porque sé que ella no se la lleva bien con su tía y está dispuesta hablar con ella para salvarme.

-Tranquila, le pediré disculpas y ya-digo ella me da una sonrisa a medias y en eso entra un hombre alto rubio de aspecto escuálido, ojos café.

-¿Desean algo?-pregunta el hombre cínicamente .

-Sí, hablar con usted-digo-mejor dicho necesito que me responda unas preguntas, pero debe acompañarnos a la estación policial de Hudson city-tomándolo del brazo y esposándolo.

-Son policías, quiero un abogado-dice el muy descarado.

-Bueno si lo desea lo puede llamar ahora, pero si no es culpable solo debe acompañarnos por la buenas-espeto molesto.

-De acuerdo, pero ¿porque las esposas?-pregunta el sospechoso.

-Prevención, ahora camine-contesto, emprendemos la marcha.

Todos observaban sorprendidos, llegamos a la camioneta nos subimos a ella, y nos marchamos en menos de la hora estábamos en la estación en el camino llame a Zabdi para que me esperara en el estacionamiento, de verdad estaba molesto, el camino de regreso fue silencioso, el jefe Richard me llamo para preguntar cómo iba todo y le informe de lo sucedido con la Fiscal Payne, primero pego el grito al cielo y luego soltó una carcajada me dijo que no me preocupara que mañana nos encargaríamos de eso.

-¡Chris!-me llama Payne, es allí cuando caigo en cuenta que ella sigue aquí-demonios estás loco pretendía matarnos deja de correr así ¡por Dios!-grita alterada.

The Hudson CityDonde viven las historias. Descúbrelo ahora