XXXVIII. PASADO PARTE 1

1K 60 1
                                    

❃.✮:▹ ◃:✮.❃⋇⋆✦⋆⋇ ❃.✮:▹ ◃:✮.❃

Capítulo Treinta y Ocho:
Pasado Parte 1

❃.✮:▹ ◃:✮.❃⋇⋆✦⋆⋇ ❃.✮:▹ ◃:✮.❃

Después del entrenamiento, los Cullen fueron a casa, donde Esme le preparo la cena a Ashley y un poco para Emma también. Bella al no quererse separar de la familia, los siguió, y el patriarca al ser tan amable, le permitió quedarse.

—Oh —exclamo Bella llamando la atención de los presentes—. Jasper, tienes una cicatriz exactamente igual que la de Emma.

Ashley miro al rubio esperando a que digiera algo. Sabia de las cicatrices, las había visto, pero no sabia e motivo de ellas.

Jasper sonrió de forma imperceptible.

—Tengo un montón de cicatrices como la ella, Bella.

El rostro de Jasper era impenetrable cuando se arremangó la fina manga del jersey. Había un montón de medias lunas curvadas que se atravesaban unas con otras formando un patrón, como si se tratara de plumas, que sólo eran visibles, al ser todas blancas, gracias a que el brillante resplandor de la lámpara hacía que destacaran ligeramente al proyectar pequeñas sombras delineando los contornos.

—Jasper, ¿Qué fue lo que te pasó?—pregunto Emma sintiendo curiosidad.

—Lo mismo que te ocurrió a ti en la mano —contestó Jasper con voz serena—, sólo que mil veces más —soltó una risotada amarga y se frotó el brazo—. La ponzoña de vampiro es lo único capaz de dejar cicatrices como las mías.

—¿Por qué? —jadeo horrorizada la pelirroja.

—Yo no he tenido la misma crianza que mis hermanos de adopción. Mis comienzos fueron completamente distintos —su voz se tornó dura cuando terminó de hablar.—. Antes de que les cuente mi historia —continuó Jasper— deben entender que hay lugares en nuestro mundo, donde el ciclo vital de los que nunca envejecen se cuenta por semanas, y no por siglos.

Los otros y a habían oído antes la historia, por lo que se desentendieron de la misma. Carlisle, Edward y Emmett centraron su atención en la televisión. Alice se movió con sigilo para sentarse a los pies de Esme y Rosalie leía una revista.

—Si quieren entender la razón, han de cambiar su concepción del mundo e imaginarlo desde la óptica de los poderosos, de los voraces o de aquellos cuya sed jamás se sacia.

» Como saben, algunos lugares del mundo resultan especialmente deseables para nosotros porque en ellos podemos pasar desapercibidos sin necesidad de demasiadas restricciones.

» Háganse una idea, por ejemplo, del mapa del hemisferio occidental. Imaginen un punto rojo simbolizando cada vida humana. Cuanto mayor es el número de puntos rojos, más sencillo será alimentarse sin llamar la atención, es decir, para quienes vivimos de este modo.

Ashley se estremeció ante sus palabras, pero siguió escuchando.

—A los aquelarres sureños apenas les preocupa ser o no descubiertos por los humanos. Son los Vulturis quienes los meten en vereda. No temen a nadie más. Ya nos habrían sacado a la luz de no ser por ellos. En comparación, el norte es mucho más civilizado. Fundamentalmente, aquí somos nómadas que disfrutamos del día tanto como de la noche, lo que nos permite interactuar con los humanos sin levantar sospecha alguna. El anonimato es importante para todos nosotros.

» El sur es un mundo diferente. Allí, los inmortales pasan el día planeando su siguiente movimiento o anticipando el de sus enemigos, y sólo salen de noche; y es que allí ha habido guerra constante durante siglos, sin un solo momento de tregua. Los aquelarres apenas son conscientes de la existencia de los humanos, o lo son igual que los soldados cuando ven una manada de vacas en el camino. El hombre nada más es comida disponible, de la que se ocultan exclusivamente por temor a los Vulturis.

Amor En Llamas - Jasper HaleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora