Narrador Omnisciente.
Samantha suspiró al escuchar que la llamaban para tomar el lugar en su auto, Abril la observó fijamente mientras se alejaba, aquellas palabras le habían dolido "Y tu me gustabas" es como si hubiera perdido a Samantha y ella de cierto modo ya lo sabía. Observó como Samantha se subía a su auto y un chico se apoyaba en su ventana para darle algunas indicaciones, el GPS ya estaba instalado en su auto y ahí saldría el circuito de aquella carrera, el premio mayor eran cien mil dólares y un contrato directo para participar en una carrera que se daría en Los Ángeles. Abril se acercó a la mesa donde estaban todos los que trabajaban con Samantha, tenían puesta una cámara dentro del auto y fuera donde se veía el recorrido que ella tomaba, desde ahí podían hablarle y Samantha a ellos, en la pantalla Abril pudo ver cómo se acomodaba en su auto, se ponía su cinturón de seguridad y apretaba algunos botones que Abril no sabía muy bien para qué. El nerviosismo y la ansiedad se apoderaron de las dos. Le pidieron a Abril sentarse al lado de uno de los principales de Red Bull y le tendieron unos audífonos para que pudiera escuchar todo que lo se decía en el auto y también pudiera hablarle, si así quería.
-Ayúdame a ganar esto, papá. -susurró Samantha.
Abril lo entendió claramente y su corazón se apretó al escuchar aquellas palabras. El silbido inicial sonó y los autos arrancaron, detrás del Lamborghini negro que encabezaba hasta ahora la carrera había un Bugatti de un corredor italiano. Abril sentía su corazón latir con fuerza, apretó sus manos bajo su barbilla mientras apoyaba sus codos en la mesa y veía por la pantalla. Samantha nunca dejó de verse hermosa y sexy al correr, todos los que veían por aquella pantalla estaban embobados ante tal mujer, incluso Abril, o mejor dicho, Abril aún más.
Dos autos rebasaron a Samantha por los costados y ésta maldijo por lo bajo, pero algunos en la mesa sonrieron por su comentario, no les preocupaba que Samantha perdiera, estaban hechizados con su pasión cuando corría.
-Tú puedes. -susurró Abril, no recordaba que tenía el micrófono muy cerca de sus labios.
-¿Abril? -Abril abrió los ojos de golpe y recordó que ella la había escuchado, Samantha también se asombró al escuchar su susurro retumbar en aquel auto.
-Ehm, sí. Concentrate Samantha, tu puedes... Sé que puedes. -dijo la empresaria.
Samantha asintió y apretó el volante, agarró la palanca de cambios y el auto cobró mucha más velocidad. El primer auto a rebasar era un Maserati manejado por un alemán. No pasó mucho tiempo cuando Samantha tomó posición en el segundo lugar, quedando solo frente a ella el Bugatti.
Samantha lo rebasó en una curva que el italiano no pudo manejar muy bien, era Miami y Samantha siendo la local tenía ventaja en cuanto al circuito pues conocía bien ese lugar, ella ya había corrido ahí. Al tomar el primer lugar nuevamente Abril sonrió mientras que todos los chicos que estaban con ella chocaban la mano entre sí y se decían algunas cosas.
Volvió a sorprender a todos siendo la primera en llegar de vuelta a donde todos estaban, los aplausos y gritos de la gente no se hicieron esperar. Samantha bajó de su auto y todos los chicos, junto con Abril, salieron de la carpa para recibirla.
Abril se reservó un poco más esta vez aunque su efusividad y emoción la tenían apunto de lanzarse encima de Samantha de nuevo. Esperó a que todos la felicitaran y cuando encontró el momento justo se acercó a Samantha.
-Hey, felicidades.
Samantha volteó a mirarla y sonrió ampliamente haciendo que las piernas de Abril fallaran por unos segundos.
-Gracias. Y gracias por hablarme en ese momento, estaba perdieron la concentración de todo.
Abril sorprendió a Samantha envolviendo sus brazos a su cuello. La ojimarrón sonrió y envolvió sus brazos por su cintura apretándola fuerte contra su cuerpo.
ESTÁS LEYENDO
Kilometraje | Rivari
FanfictionAbril Garza ha entrado muy rápido en los negocios de su padre. A sus 22 años maneja algunas de las Empresas Garza, y se ha encargado de ganarse el respeto de todos los que trabajan para ella. Se había convertido en una persona dura en los negocios...