Capítulo 64

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Pov Samantha.

Se acercaban los días para Año Nuevo y con Abril las cosas iban cada vez mejor, yo le había explicado como sucedieron exactamente las cosas ese día y ella creyó en mí, hicimos el amor esa noche cuatro veces, le demostré que es la única persona la cual me vuelve completamente loca y la única capaz de hacerme sentir tanto.

Abril había tomado vacaciones por Navidad así que pasábamos todo el día junto a Leah.

Hoy teníamos una cena en casa de Rocio, para ella era importante que fuéramos así que no podíamos rechazarla.

Abril salió del baño con Leah en sus brazos envuelta completa en su toalla rosa. La dejó sobre nuestra cama y yo le sonreí cuando su pequeño rostro se asomó para verme.

-Es tu turno. -me lanzó un besó y se tiró sobre la cama.

-A ver, pequeño monstruo. -me acerqué a ella y la puse de pie sobre la cama, quedando ella casi a mi altura.

Terminé de secar su diminuto cuerpo y, cuando estaba pasando la toalla por su cabello ella rió, lo que me hizo sonreír.

-¿A donde vamos mamá?

-Vamos a ir a comer con unos amigos. -le sonreí y comencé a vestirla- ¿Te acuerdas de Rocio y Vicky? -ella asintió.

-Tía Vicy. -dijo Leah emocionada

-Es Vicky cariño, con una K. -la corregí, intentando contener la risa, me parecía muy tierno que no pueda hablar bien.

-Bien mami. -dijo asintiendo.

-¿Le dices tía Vicky? -le pregunté con una sonrisa.

-Ella me dijo que era mi tía, ¿verdad mami?

Miró a Abril quien asintió sonriendo.

-Pues es tu tía, entonces.

Leah quedó lista, llevaba puesto un vestido de cuadros rojo con negro, unas medias rojas y sus zapatos negros. Que yo, especialmente, le compré. La peine y dejé su cabello suelto, liso y se veía hermosa. Abril y yo nos vestimos en máximo cuarenta minutos y ya estábamos por irnos. Mi castaña le colocó un abrigo negro a Leah encima, y yo me coloqué uno muy parecido también.

De camino a casa de Rocio, Leah y yo comenzamos a cantar para segundos después Abril unirse a nosotras, cantando entre risas.

Cuando llegamos bajé a Leah de la camioneta y acomodé su abrigo, estaba simplemente sobre sus hombros, como yo. Al entrar noté muchas caras conocidas, que sonrieron al verme.

-Pero si llegó mi chica favorita.

-Lo sé Vicky.

-No hablo de ti, Samantha. Aunque estás muy guapa. -sonrió y se agachó a la altura de Leah quien sonreía feliz- Hablo de esta niña hermosa. -rodé los ojos y sonreí.

-Hola, mi amor.

-Hola tía.

El rostro de Vicky se iluminó como hacía tiempo no lo hacía.

-Te extrañé ¿sabes?

Leah rió y se acercó para dejar un beso en su mejilla. Sentí la mano de Abril tomar la mía y la miré, me sonrió vimos como Vicky cargó a Leah y caminó hacia los demás invitados luego de saludar amablemente a mi novia.

Estaban todos ahí, todos mis antiguos amigos. Incluso Félix estaba ahí.

-¿Me das un beso? -susurró.

Le sonreí y me incliné para juntar nuestros labios, ella jaló levemente mi labio inferior con sus dientes y yo suspiré. Sabía porque lo hacía pero no me molestaba en lo absoluto y ya que Leah estaba distraida con Vicky, quien la presentaba a todos sus amigos muy orgullosa diciendo que era tía, ¿por qué no besar a Abril?

Kilometraje | RivariDonde viven las historias. Descúbrelo ahora