Capítulo 15

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Pov Calle:

Los días pasaron densamente, cada segundo se esfumaba tan lentamente que se asemejaban a las horas, cada atardecer se desvanecía tan tristemente tras los cristales empañados de mi ventana, que conseguían hacerme sentir menos solitaria tras la espesura que conformaba mi habitación.

No recuerdo muy bien la última vez que salí de aquí, hacía escasa una semana, había recibido las vacaciones de navidad, mamá como era costumbre, había decidido viajar y yo, como cada año, me encontraba habitando aquella solitaria casa a la que me veía obligada a llamar hogar.

Escuché como unos tenues golpes en la puerta pedían permiso para acceder a la que hacía años se convirtió en mi zona de confort.

C- Adelante- dije alzando mi voz.

Como era costumbre, esperaba que la figura de Marta se vislumbrase tras el umbral de la puerta, pero para mí sorpresa, fue el rostro de María José el que apareció en su lugar.

P- Pe...erdón, mi madre la llama- susurró con voz temblorosa.

Desde el incidente que tuvimos hace varias semanas, su comportamiento cambió drásticamente, manteniéndose alejada de mí el máximo tiempo posible.

Eso me dejaba un amargo sabor de boca y la confusión latente tras mis pupilas.

C- Dile que voy enseguida- espeté saliendo de mi cama.

Pude escuchar el pequeño suspiro que dejó escapé Poché, haciéndome recordar que me encontraba en brassier y cucos.

El rojo carmín tiñó rápidamente mis mejillas ante la arrolladora sensación de vergüenza que se instaló en mí.

Fui capaz de observar como la mirada de María José recorría con descaro mi cuerpo, haciéndome sentir observada.

C-¿Te importaría salir de mi cuarto?, o al menos dejar de mirarme- murmuré entre furiosa y nerviosa.
P- No te estoy mirando- se defendió rápidamente- más quisieras.

Suspiré frustrada, odiaba cuando Poché adquiría aquel comportamiento.

C- Eres una mentirosa- le rebatí dándome la vuelta.
P- Danielita, no me gustas, deja de soñar despierta, ni en tus sueños estaría mirándote- espetó con indiferencia.
C- Eres una estúpida maleducada- espeté llena de rabia- sal de mi cuarto ahora- le ordené señalando la puerta.
P- Relájate bonita, parece que la niña mimada se molesta si no se siente el centro de atención- habló en tono burlón.
C- Te vas a enterar- dije enfurecida mientras me acercaba con paso ligero hacia ella.

Escuché como soltaba una carcajada, provocando que la ira burbujeara en mi interior.

Cuando estuve a escasos centímetros de su rostro, alcé mi mano dispuesta a dejarla caer sobre su cara, pero un fuerte agarre en mi muñeca detuvo dicha acción.

P- Ni lo sueñes, bonita- espetó seriamente.

Me removí intentando deshacerme de su agarre, para así poder separarme de ella.

Aquel zarandeo solo consiguió que nuestros cuerpos chocaran entre sí, y de nuevo, varias semanas después, me encontraba a milímetro de la persona que no abandonaba ni un segundo mis sentimientos, de la persona que alteraba mi frecuencia cardiaca solo con el olor de su perfume, de la persona de la que estaba locamente enamorada, de ella, de Poché.
Y aunque odiase admitirlo, en mi interior rogaba por que aquella pequeña distacia que aún se encontraba entre nosotras, fuese rapidamente eliminada.

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Holaa🤍🤍 cómo andan??

Espero que os guste el capítulo ☺️☺️

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