Ansiando escapar

Capítulo 2

Pov Daniela:

Dinero, dinero y más dinero; aquellos trozos de papeles coloreados inundaron mi infancia y adolescencia, me acostumbré a vivir rodeada de aquellos billetes que para la sociedad tenían valor pero para mí no.

Me pasé mi vida obteniendo todo lo que deseaba, quería, ansiaba, pedía o necesitaba, por lo que poco a poco fuí perdiéndole el valor a las cosas.

Los años pasaron y aprendí a aparentar, a colocar en mi rostro una sonrisa cuando las lágrimas eran las únicas que morían por salir, a abrazar y decir te quiero vacíos, a reír a carcajadas mientras retenía mi llanto, a crear una barrera que evitara que me dañaran más cuando lo único que necesitaba era un poco de amor verdadero. 

Con el paso del tiempo descubrí que el dinero podía darme todo lo que desease, todo menos lo que más necesitaba, todo menos amor.

Como cada mañana despertaba en mi enorme habitación, las sábanas blanquecinas abrazaban delicadamente mi cuerpo proporcionándome lo que hace tiempo consideré un abrazo. Su suave textura recorría cada parte de mi piel cubriéndola con su sutil calor.

Dejé escapar un suspiro mientras estiraba mis extremidades dejando que el gélido aire calase mi sistema, despertándome de aquel letargo.

Entré al baño, deshaciéndome de mi pijama para posteriormente dirigirme a la ducha, las pequeñas gotas de agua caliente cayeron por mí torso, empapando de calidez mi piel, el habitáculo comenzaba a inundarse de una espesa niebla blanquecina que empañaba los cristales impidiéndome observar mi reflejo en él.

Cerré mis ojos sintiendo mi respiración, todo a mi alrededor se sumió en un agradable silencio, mientras que los latidos de mi corazón hacían eco en mi cabeza permitiéndome sentir por segundo una saciante sensación de paz.

M- Daniela- aquel agudo tono de voz me sacó bruscamente de mis pensamientos.
C- ¿Mamá?- pregunté dubitativa. 

¿Qué hacia ella todavía aquí?- pensé mientras apagaba la ducha.

M- Date prisa, tenemos que presentarte a alguien, te esperamos abajo- avisó saliendo de la habitación.

Tomé mi toalla comenzando a secar rápidamente mi cuerpo, me dirigí al armario tomando lo primero que encontré.

Deslicé los suaves pantalones deportivos a lo largo de la pálida piel de mis piernas, permitiéndome sentir la sutileza del contacto de las yemas de mis dedos sobre esta.

Desenredé mi cabello pasando mis dedos entre las hebras de este, dejando que cayese desordenado por mi espalda, di una mirada rápida al espejo encontrándome con un reflejo que comenzaba a odiar. Mordí mi labio inferior intentando retener mis lágrimas, suspiré, coloqué mi mejor sonrisa y bajé buscando a mi madre.

Era hora de volver a jugar a ser la familia feliz.

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Holaa🤍🤍 cómo andan??

Espero que os guste el capítulo ☺️☺️

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