LUKE
Nuestro diseñador entra en la habitación para observar si el maquillaje y el peinado son adecuados para la vestimenta de esta ocasión. Aunque tenemos tres años trabajando con él y somos grandes amigos en los días de eventos se vuelve un poco perra, por otro lado Ariel lo contrarresta siendo igual o peor y los cuatro terminamos en medio de una pelea de egos entre Marcus y nuestro manager. De todas formas siempre hemos tenido buenos comentarios a nuestro estilo y los dos archienemigos resuelven sus diferencias bebiendo juntos en la fiesta.
- ¿Qué dices Karina? ¿Te gusta los aros plateados en Tom o prefieres los dorados? – inquiere Marcus a su asistente.
- Los plateados se ven geniales, déjalos.
- Pónganse en fila, necesito fotos para mi catálogo – chilla el hombre, dando tres aplausos rápidos y fuertes para apremiarnos.
- ¿Por qué le tomarás fotos si no he aprobado el vestuario? – pregunta Ariel, bloqueando su teléfono y dejándolo sobre la mesa.
- Porque ni tú puedes negar a que estos atuendos están geniales – chilla el hombre, apuntándonos.
Lo cual es innegable. Desde que comenzamos a trabajar con él cuando nuestra carrera despegó hemos aclarado que no deseábamos vestirnos iguales pero que si queremos lucir armoniosos, él acepto sin dudarlo especificando que las Boybands que se vestían igual eran de mal gusto. Aunque no fuésemos una boyband, considerando que hacíamos música indie y no pop, entendíamos la idea.
Por lo mismo durante este tiempo hemos jugado con colores, tonos y texturas iguales. No usamos uniformes pero vamos en sintonía respetando nuestro estilo personal. La noche de hoy el código de color era tinto, blanco y negro. Mi ropa era particularmente cómoda y me hacía sentir como todo un rockstar rompecorazones, cosa que obviamente no era pero nadie debía saberlo. Con un suéter blanco, un conjunto de chaqueta y pantalón negros y un sombrero vinotinto, pues me sentía espacialmente atrevido, el reflejo del espejo me hacía muy feliz.
Sentados a mi izquierda y derecha estaban Martin y Sebastian, respectivamente, revisando su teléfono. El primero llevaba una camisa blanca de satín con los primeros tres botones abiertos, el detalle de las costuras y bonotes negros la hacía lucir más elegante y llamativa, junto a eso llevaba un pantalón de vestir vinotinto bastante ancho. El hombre a mi derecha iba con un pantalón de vestir un poco más pegado que el de Martin y una camisa negra de cuello redondo junto a una chaqueta formal vinotinto.
Teniendo una idea divertida decido tomar una pequeña foto de nosotros tres sentados, enfocando la cámara en nuestro reflejo en el espejo coloqué una mirada divertida aunque Martin y Seb no despegaron su vista de su teléfono. Seleccionando el nombre de Sammy entre mis contactos la envío sin pensarlo mucho.
Yo: un ex y dos amigos, quién se verá mejor???
Sammy: Quien se esperaría que Luke Maxwell fuese divertido?
Sammy: Obvio mi mejor amigo del centro es el más guapo.
Sammy: siempre eres el más guapo ;)
Me río sin poder evitarlo, le respondo enviando muchos stickers divertidos y oyendo como la estúpida discusión entre Marcus y Ariel sigue sucediendo.
- ¡Claro que no te gustan los aros dorados! – chilla el diseñador -. Los plateados son los mejores.
- ¿Ahora sabes lo que me gusta y lo que no?
- Sé lo que es tener bien gusto y tú no lo tienes.
- Thomas se ve bien – bufo enfadado, viendo como de los cuatro es quien luce excesivamente mejor con sus pantalones negros de vestir, sus botas de combate, su suéter cuello alto tinto y su sobretodo blanco con negro -. Necesitamos irnos ya.
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Hands in the dark ( #1 Trilogía Heatstroke)
RomanceSamantha solo quiere amar las cosas sencillas de la vida: reírse en el trabajo con sus amigos, tener citas espontáneas con su novio y compartir historias con alguien antes de dormir El problema radica en que su trabajo es una mierda, su novio un imb...