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 Pov. Jinah.

Hoy era el gran día, el cual presentaríamos por fin nuestro baile a aquellos profesionales. Al ser un día especial las clases fueron canceladas y Taeyong no tuvo la mejor idea fe encontrarnos en la sala de ensayo horas antes, dijo que nos haría bien practicarla unas cuantas veces más antes que nos ayudaría a quitarnos los nervios. Espero y tenga razón porque nunca me había sentido tan nerviosa.

Al cabo de unos cuantos minutos él hace presencia en la sala, se disculpa por haber tardado diciendo que tuvo unos inconvenientes los cuales no entendí y tampoco le pregunté. Dejó su mochila a una de las esquinas del espacio antes de acercarse al centro, donde yo me encontraba esperándolo.   

Su mirada es una confundida al darse cuenta de que no emití una palabra desde su llegada. Por mi parte hago una mueca con mis labios antes de quitar mis manos detrás de la espalda 

¿Y esto? —pregunta cuando le acerco una rosa roja, sin objetar las toma con delicadeza teniendo miedo de quebrarla.

La encontré mientras estaba en camino. Pensé que te gustaría — sonríe inspeccionando todo de ella, como si fuera la primera vez que la ve. El brillo que sus ojos producen cuando ve algo que le gusta, como en este caso las rosas, es algo difícil de explicar con palabras. Tiene un brillo que desde mi punto de vista lo podría definir como el brillo de la luna, así de hermosos son. Y es algo que lo voy a mantener para mi como un secreto y solo me dedicaré a observarlo con una leve sonrisa para no levantar sospechas.— Creo que te debo una disculpa —confieso después de un buen rato en silencio.

¿Por qué? —alza su mirada para cruzarla conmigo.

Por todo en realidad. —afirmo con un asentimiento de cabeza.

Esta bien...—con una sonrisa a contrario de mi niega. —Si esta es tu manera de confesarte, me gusta —por su sonrisa burlesca se que no es más que otra broma.

Déjate de bromas Lee —me cruzo de brazos  mostrando que no me fue gracioso lo que dijo.

Si aceptas mis sentimientos dejaré de bromear. —abre demasiado sus ojos a la vez que alza sus cejas reiteradas veces.

Eres impresionante —me quejo suspirando por su insistencia en ese tema.

Lo sé —lleva ambas manos suyas a su rostro dejándolas en la mejillas , es un acto tierno o eso se supone que hace.

¿Por qué no miras hacia otro lado? —le pido luego de sentir por demasiado tiempo su mirada en mi, aún acunando su rostro.

Porque no tengo otra belleza que ver, solo tú. —no entiendo como es capaz de soltar aquellas palabras sin timidez.

Oh, lo lamento romeo — ruedo los ojos y no puede evitar reírse. Aclaro mi garganta quitándome la vergüenza de encima que toda esta escena me propino.

[ ✧✦✧ ]   

Después de acabase con sus bromas comenzamos a elongar nuestros cuerpos para dar comienzo a nuestro último ensayo antes de mostrar el resultado final a los profesionales. Cuanto más lo pienso es cuanto más nervios siento. No es bueno que mi primera vez presentando una coreografía sea con miles de pares de ojos mirándome y mucho peor siendo bailarines profesionales.

Para mi mala suerte me he equivocado en cosas mínimas, lo que nos llevo a repetir ese paso de la coreografía una y otra vez. En cada una de ellas era un nuevo error que cometía. Frustrada conmigo misma le dije de tomarnos unos minutos y fui por mi botella de agua.

The Girl With That Hoodie ━━ Lee TaeyongDonde viven las historias. Descúbrelo ahora