Inspirada en ESA escena de Mean Girls.
En una escuela privada del sector rico de un país primermundista, los adolescentes se encuentran con mucho tiempo libre. La creación de chismes a través de carteles en los pasillos de la escuela y por una págin...
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Nada. Aún nada. Sus escritos estaban intactos como el primer día que lo habían preparado. Tal vez aumentar sus esperanzas no le había ayudado en nada. El título estaba allí, la justicia de... y sin embargo nadie había interactuado con él. Mejor idea hubiera sido que tratara con ese tema desde un principio como lo terminó siendo: un simple cuadro, un adorno en el día a día de todas las personas que pasaban por esos vestidores, una presencia sin más; inalterable, que no necesitaba más. O, era un objeto de burlas.
- ... Laura - llamó su atención la chica a su lado, y la rubia salió de su ensimismamiento. Ni siquiera había notado lo concentrada que estaba mirando el pizarrón blanco que sus manos se detuvieron a medio atar sus cordones.
- ¿Eh?
- ¿Que qué vas a votar al final? - Sam preguntó a su lado, guardando sus botines viejos, pero que no tocaron el césped en todo el día, en su bolso. - Elige con cuidado. Ahora mismo tu voto debe valer por dos.
- Hey, ¿ya te ganaste trato especial? - Charlie celebró frente suyo en la otra banca, con una sonrisa de orgullo y mostrándole un puño motivacional en el aire.
- No, para nada. - Laura negó con la cabeza, algo divertido. - Si es por algo, creo que perdí toda estima el sábado.
- Bueno, por suerte nadie te vio vomitar los waffles luego, así que estamos bien - Sam levantó ambas manos al aire, recordando la salida nocturna que tuvieron luego de la fiesta. Había sido más sonidos de cubiertos chocando con platos que otra cosa, y estaban alejándose de ese éxtasis de la fiesta y el alcohol ahogándose en un comedor mal iluminado. Pero no olvidaría la sensación del momento y que, sin duda, tuvo cierto incidente en la calle cuando salieron en busca de su coche.
- Yo... - tomó aire. - Teniendo en cuenta que estamos haciendo esto para que todos puedan tener voz, sólo me parece justo que cada uno pueda decidir sobre cómo hacerlo. - Laura encogió un hombro, pero Sam hizo una mueca y chasqueó con la lengua.
- Mejor no me ayudes a decidirme.
- Tengo una pregunta - Charlie dijo desde su sitio, torpemente levantando la mano como pidiendo permiso para hablar. Laura rió ligeramente. - ¿Por qué no puedo ir yo a este grupo? Necesito ver a Ander Boyce y Andy convivir en un mismo grupo.
Sam dejó de enfocarse en guardar sus cosas en su casillero y se dio la vuelta para enfrentar a la chica. Ladeó la cabeza, mirándole con una ceja enarcada.
- Digo, si ella va y no le interesa hacerlo por sí misma, sino que va a ayudar... ¿por qué no puedo ir yo?
Sam alzó las cejas tan alto que Laura no pudo evitar reír. Ambas corrieron la mirada y evitaron la respuesta que ya sabían. No es como si fuera la mejor experiencia estar allí...
