Love me [jorey]

²⁹

Iowa.

Iowa era un lugar apartado y solo, todos se conocían entre sí. Error que cometías error que todos te van a reclamar.

Y ni hablar de Slipknot. Todo Iowa conocía a los chicos y mantenerse en su lugar natal era tan beneficioso como perjudicial, todo el tiempo tenían a gente detrás de ellos, todos los conocían y al ser figuras públicas nadie los respetaban, invadían su espacio personal, hace unas semanas vieron a Joey con Amanda, eso desató una pelea en la pareja. Pero Corey se calló una vez Joey le recordó que a él también le pasó.

Corey realmente desconfiaba de esa chica, podía ver como se comportaba cuando Joey la miraba o hablaba. Su voz le irritaba, todo de ella le molestaba pero a Joey le gustaba como cocinaba, debería tomar clases de cocina.

—Amor... Hablemos, dime cuando yo haga algo que te moleste o lastime. Sabes que soy un bruto y aveces no mido mis palabras. No quiero lastimarte, quiero que cuando estés conmigo olvides todo, que tus problemas se vayan una vez llegues a casa, quiero que nuestros besos te alienten, quiero hacerte sentir amado, quiero que sientas cuanto te amo, amor.— Llevó su mano derecha a su mejilla, su chico de ojos color cielo lo miraba apenado y ilusionado, una pequeña sonrisa se asomó de sus pequeños labios rosas.

Estaban en el estudio los demás aun no llegaban —Tendremos mas comunicación...— Dijo el menor acercándose —No te alejes Corey. Yo aprendí a quedarme apesar de tener miedo... No te alejes para sufrir solo, no busques a alguien más cuando me tienes a mi... Me tienes Corey y realmente lo odio porque sé que puede ser peligroso, pero confío en ti— Susurró Joey tratando de no temblar, era tan difícil para él abrirse de esa manera, pero Corey tenía razón, si realmente querían estar juntos deberían hablar sobre todo lo que sintieran, sea bueno, malo o triste.

El amor podía ser complicado y a la vez tan hermoso. Podía sentir a sus órganos apunto de explotar cada vez que Corey le decía algo lindo o tierno, al menos así se sentía en su estómago. Pero también podía sentir como su pecho se cerraba y su espalda de encorvaba cada vez que peleaban o se alejaban, sentía como el aire se iba de su cuerpo ahogandolo.

Miro como el rubio le sonreía, sin poder evitarlo se sonrojó, no podía evitarlo, Corey lo enamoraba y eso le daba tanto temor y a la vez alivio, sentía como cada vez se aceptaba mas pero también sentía el miedo por la banda. Borró los malos pensamientos de su mente y se abalanzó contra el cantante, le robo un beso.

Las manos fuertes de su pareja bajaron hasta sus caderas, las suyas subieron hasta su rostro.

Un beso suave y delicado comenzó. Sus labios enredandose y separándose para volver a juntarse, sus cabezas moviéndose de un lado al otro. Corey estaba en un sueño, cada vez que Joey lo besaba mientras estaba despistado lo sentía así, como si fuera irreal, Joey era tan bueno y perfecto que era mucho para este mundo.

Una vez se separaron rieron y juntaron sus frentes —Te amo Taylor, no lo vuelvas a dudar, se que no lo digo demasiado pero te lo confirmo con hechos... Te amo tanto que no puedo decírtelo, tengo que demostrártelo. Me da miedo decirlo porque es una palabra muy grande y que debe usarse en momentos especiales— Corey sonrío por lo tierno que se veía explicando algo tan obvio —Que cursi eres— Dijo el mayor volviendo a besarlo, simplemente no podía evitarlo, necesitaba besarlo para saber que esto era real. Las manos de Joey bajaron a su cuello, lo acariciaba tan suave, sus manos se metieron dentro de su camiseta de Iron Maiden, tocaba su tersa piel, tan suave y cálida, sus manos viajaron hacía su cintura, inmediatamente lo apoyó contra la primera pared que encontró, rieron y volvieron a juntarse, todo estaba tan bien, todo se sentía bien, no pasaría un día mas sin ocultarlo, tomaría a Joey donde fuera, lo abrazaría, lo sentaría sobre él o lo apoyaría contra su pecho, le importaba una mierda todo, él amaría a Joey le gustara a la gente o no.

—Oh, chicos, si van a besuquearse al menos chequeen que la puerta este cerrada con llave— Se separaron rápidamente, sus corazones latían ferozmente, tanto por el beso y los sentimientos como por el susto que se llevaron. Chris había entrado con un par de bolsas, traía cervezas y comida para acompañar. Hoy festejarian en su estudio el exitoso lanzamiento de Iowa ya que una vez la terminaron decidieron distanciarse, Iowa había creado un caos increíble entre ellos. Hoy olvidarían todo lo sucedido, los insultos, peleas y malos entendidos para poder empezar de cero.

Saludaron a Chris, que los felicitó por su reconciliación diciéndoles que si no lo hacían los encerraria en un cuarto con una cama para que lo hicieran —En serio chicos, cuídense mucho, mas ahora que la banda sospecha sobre ustedes. Jim dijo que estaban muy pero muy raros, diciendo que eran muy dulces un día y al otro ni se miraban— Dejó las bebidas en la mesa que tenían en el estudio —Si van a ser gay sin decírselo a la banda al menos disimulen sus homosexualidades— Dijo Chris en tono sarcástico para que la pareja riera —No quiero verlos mal, porque, para mi mala suerte, me afecta verlos así— Corey sonrío y dijo —Aw, eso sonó tan gay— Ambos rieron mientras el percusionista pensaba en lo que había dicho —Me estoy juntando mucho con ustedes, me están pegando sus mariconeadas poco a poco— Bromeó sentándose en una de las sillas, Joey se sentó a su lado mientras Corey ponía música para que hiciera ruido de fondo —Joey... ¿Joseph te ha llamado?— Preguntó tomando una botella de cerveza, Nathan estaba extrañado por ese interés del mayor —Si, un par de veces ¿Por qué?— Lo miró y él evadió la mirada, algo pasaba —No, por nada... ¿Irás a Los Angeles?— Joey empezó a captar por donde iba esto —Si, en unos meses, aun no lo tengo muy claro ¿Por qué?— Cruzó sus piernas llevando una de sus manos a su barbilla, Corey se había sentado a su lado y apenas lo hizo apoyó su mano contra su muslo —No por nada, pero ¿Podría acompañarte?— Preguntó el número tres tomando un trago de su cerveza, aun no lo miraba. El menor miró a Corey quién había escuchado todo a medias.

—Hola muchachos— Saludaron Jim y Mick cuando entraron al estudio y detrás de ellos estaban los demás.

Rieron y tomaron, hablaron y bromearon. Tomaron fotos y sin poder evitarlo tocaron. Slipknot era su segunda familia y era tan bueno tenerla. Knot era una escapatoria para los nueve, era un lugar donde todos se apoyarían y seguirían. Sin Slipknot ninguno sería nada, los nueve necesitaban a los demás, se necesitaban entre sí para sobrevivir esta vida llamada "fama".

🫀

Que onda mi gente

BUENO, el drama me está respirando en la nuca pero un no llega asi q no lloren todavía.

Recuerden que esto es por merito propio, pero también para ustedes así que si hay algo que les molesta o no entienden lo dicen así les explico.

los quiero bai bai cuidenseeee