Chocolate | Wandanat

28. Esto no está funcionando

Era reconfortante el abrazo que la envolvía, después de la discusión con Natasha, se sentía totalmente sola y perdida, no sabía cómo solucionarían sus problemas o siquiera si habría alguna solución, no veía ninguna salida posible, había intentado solo disculparse y defenderse, pero no podía solo atacarla y esperar que se quede callada, ella también tenía muchos motivos para desconfiar o argumentos que podía utilizar, su paciencia se agotó en ese momento, no iba a simplemente seguir quedándose callada, ya no.

– ¿Gustas agua o un té tal vez? – Escuchó de la persona que la había abrazado y consolado desde que llegó ahí

– No, así estoy bien – Se abrazó más a ella

– Yo te veo sufrir mucho en esa relación, creo que Natasha está empeñada en conseguir alguna prueba de que eres mala para ella y así terminar contigo sin sentirse culpable ¿No crees? – La alejó un poco para verla a los ojos – Solo te lastima y te cela constantemente, ni siquiera quiere escucharte – Acarició la mejilla de ella limpiando una de sus lágrimas

– No, ella no es así. Natasha no quiere herirme, ambas estamos confundidas, nunca nos dimos el tiempo de hablar realmente, creo que eso es lo que pasa – Decía convencida de sus palabras, pero la mirada de Natalie la hacía pensar diferente

– Quiere que tú tengas la culpa de su relación, quiere creer que tu arruinaste todo. Es obvio, Wanda ¿En serio no lo ves? – La observaba consternada, como si la pelirroja diría cosas ilógicas

– Natasha no... – La mirada que le daba Natalie la ponía nerviosa, tal vez sí tenía razón y solo quería justificar a su prometida

– Te ves linda cuando lloras – Wanda entrecerró los ojos sintiéndose descolocada

La pelirroja la vio fijo y notó un brillo en los ojos de la rubia – Es lo que toda mujer quiere oír después de horas llorando de desconsuelo – Rio levemente

– Déjame cuidarte, Wanda – La tomó por las mejillas limpiando sus lágrimas – Natasha no te merece, solo busca dañarte constantemente, no entiende la importancia de tu trabajo, ya no está al lado tuyo para celebrar tus logros, ella te aparta de su vida haciéndote la culpable de todo – La pelirroja no sentía que veía las cosas de ese modo, pero Natalie sabía todo lo que pasaba esas últimas semanas y también le contó lo que sucedía antes, tal vez tenía razón y era momento de rendirse en su relación – Olvídala, deja de herirte tu misma siguiendo con ella

La boca de su amiga encima de la suya la tomó por sorpresa, tal vez era lo correcto dejar a Natasha ir, sintió como la recostaba en el sofá y se ponía encima suyo sus manos fueron rápidas al recorrer su cuerpo, los besos bajaban por su cuello mientras sentía que su camiseta se elevaba.

– No, espera, detente – Wanda intentó levantarse, pero Natalie ejercía fuerza con ella

Su amiga se levantó de encima suyo, con una expresión frustrada, la pelirroja se sentó alejándose un poco de ella.

– No voy a engañar a Natasha – Se apresuró a decir

– Pero sí terminarás con ella, supongo – Cambió su expresión a una suave – Es por tu bien

– No quiero tampoco eso – Decía conflictuada – Yo, no lo sé, me siento confundida

– Lo entiendo – Acarició su cabello con una leve sonrisa – Yo estaré a tu lado, apoyándote, aunque cometas el error de seguir con Natasha

Wanda pensaba seriamente en lo que decía Natalie, no la aconsejaría mal, ella era su amiga, solo quería verla feliz ¿Verdad?

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