𝐋𝐨 𝐪𝐮𝐞 𝐧𝐨 𝐩𝐮𝐝𝐢𝐦𝐨𝐬 𝐞𝐬𝐜𝐨𝐧𝐝𝐞𝐫

𝑴𝒊é𝒓𝒄𝒐𝒍𝒆𝒔, 26 𝒅𝒆 𝒎𝒂𝒚𝒐

La mañana está silenciosa, triste. Me he levantado sin ganas de seguir el día. 

Me quedé acostada con Logan hasta que estuvo más calmado y se durmió. Me dolió en el alma ver a Logan tan partido por dentro. No se merece todo lo que está sufriendo. Después volví a mi casa, junto a Christopher. Lo peor de todo es que mis padres no se veían tan alterados o dolorosos como nosotros en la casa de los Stone. Entiendo que se hayan preocupado por mí y de que se alegren por haber cogido al "culpable" que me hizo daño, pero su falta de sensibilidad me ha afectado. Mis hermanos, sin embargo, sabían que Daryl para mí era un gran amigo, y ellos si lo han sentido bastante.

Bryce y Audrey han salido por la mañana muy temprano para ir a verificar que el cadáver es de Daryl. Solo de pensarlo se me revuelven las tripas. Logan probablemente estará solo, así que decido levantarme para ir a apoyarle.

Nada más mirarme en el espejo, me asusto de mi rostro. Tengo el pelo revuelto y los ojos hinchados y rojos, de haber llorado gran parte de la noche. Se nota solo con verme que no ha sido una buena noche.

Después de la ducha, bajo a la cocina y cojo algunas galletas que hice, unas que le gustan bastante a Logan. Intentaré subirle los ánimos como sea, aunque sé que será difícil y nada podrá llenar el vacío que se ha quedado en él.

Mi madre me ve salir de casa. No me dice nada, sabe que no haré caso a nadie hoy.

Llego a la puerta de Logan, otra vez con mi guardaespaldas. No creo que salga sin él estos días, no me conviene. El mayordomo me abre y me indica que Logan está en el sótano.

Me aterrorizo ante la idea de encontrármelo una vez más intentando matarse con un coma etílico. Bajo corriendo hasta el sótano, mi respiración se ralentiza al ver que solo está sentado en el sofá, viendo cosas de Daryl.

-Amor mío... ¿Cómo estás hoy? -Me siento a su lado y dejo mi cabeza apoyada en su hombro. Él me saluda con beso en la frente. Saluda también a Christopher.

-No sé cómo estoy, lo único que sé es que Daryl está muerto y no debería ser así.

-Joder, Logan. Lo siento tanto... -Trago el nudo que tengo en la garganta.

-Tranquila, nos vengaremos.

Ojeo los objetos que tiene Logan delante, ahora mismo está viendo un antiguo álbum, donde la mayoría de fotos son de Logan con su madre, casi no se ve a Daryl.

-Perdía el tiempo odiándolo... Si me hubiera dado cuenta antes de que él era la persona que necesitaba, no habría perdido el tiempo. -Su voz se rompe y siento la necesidad de abrazarlo. -Sus padres no eran los míos y aun así ha querido a mi madre como la suya y a Bryce como un padre. Quien haya hecho esto...

-No te tortures más. Estás dolido ahora, pero cuando podamos vengarnos todo cambiará.

-No cambiará nada, Daryl seguirá muerto.

Se levanta, deja el álbum mal abierto encima del sofá. Lo sigo hasta la entrada. Parece que Bryce ya ha llegado. Se quedan mirándose fijamente. Al cabo de unos segundos, sus miradas cambian. Era el cuerpo de Daryl. Logan tira de un puñetazo la maceta de encima de la mesa central, descargando toda la rabia en ese golpe. Sus nudillos han quedado ensangrentados, pero no le veo quejarse. Bryce intenta decirle algo, pero se marcha antes de que pueda escuchar lo más mínimo.

-Charlotte, habla con él.

- ¿Y qué le digo? ¿Intento reconfortarlo por su hermano muerto? ¿Es que acaso no ves el problema? ¡Su hermano ha muerto!

Bryce se acerca rápidamente a mí, hasta quedar a pocos milímetros. Su altura me impone y está claro que no puedo hacer nada ante él.

-Tenía un plan, pero vosotros habéis actuado sin pensar y habéis puesto todo en peligro. Así que ahora no vayáis de dolidos. Yo he perdido a un hijo. -Deja de señalarme con el dedo.