Treinta días para enamorarme || 2 || AG [✓]

D Í A 1 0

꧁ A C I E R T O ꧂

Narra Aidan.

Sofi, Elías y yo habíamos tenido una clase hace unos minutos, a pesar de ser sábado. No solía ser así, pero me había costado trabajo salir de la cama y claro, que Sofía casi me arrastrara hasta el salón, por suerte, ya éramos libres hasta el lunes.

—Necesito buscar a TN.

—Yo quiero ir, quiero conocerla —Sofi se emocionó.

—No lo sé —rasque mi nuca—. Me da miedo lo que puedas decir.

—¿Qué significa eso? —me miró con una ceja alzada.

—Que eres muy indiscreta, preciosa —mi amigo la abrazo por los hombros.

—¿Indiscreta? ¿Yo? —nos miró ofendida.

—Un poco, si.

—¿Y en qué podría ser indiscreta? —se cruzó de brazos.

—Encontraras algo —Elías rió y recibió un ligero golpe de su novia.

—¿Eres mi novio o mi enemigo?

—Es que si eres un poquito indiscreta, sin querer, pero lo eres —la miro apenado y ella suspiro.

—Puede y solo puede, que tengan razón —me miró—. Pero anda, quiero conocerla —hizo carta de cachorrito.

—Vamos, no soy como tu novio para que eso me convenza —bufo—. Pero está bien, te la presento -sonrió.

—¡Vamos ya entonces!

Nos tomó a mi y a Elías de las manos y nos arrastró fuera del edificio donde fue nuestra clase. Nos guíe hasta donde sabía que podría estar TN y no me equivoque, la vi a lo lejos en una mesa rodeada de otras seis personas, Julio entre ellos; sus risas se escuchaban de sobra. Mientras nos acercabamos vimos a cuatro de ellos levantarse y despedirse del par de amigos dejándolos solos.

Mi rubia amiga se adelantó y aún que Elías y yo tratamos de detenerla, escapó de nuestras manos logrando llegar a TN antes que nosotros, se sentó junto a ella mientras TN la veía con una sonrisa y el ceño levemente fruncido.

—Sofía Powell —estiró su mano en dirección a TN.

—TN Neumman —la estrechó.

—Si que eres linda, chula —le guiño y TN se sonrojó haciendo reír a Julio.

–¡Sofía! —mi amigo se cruzó de brazos.

—¿Qué? No le voy a mentir —sonrió.

—¿Qué tal? Soy Elías.

—TN y él es mi amigo, Julio.

—Me siento ignorado —me senté quedando frente a TN.

—Que desgracia —dramatiza Julio.

—Hola Aidan.

—Hola princesa —sonreí.

—Si que lo traes mal, chula, no deja de hablar de ti y lo maravillosa que eres —Elías y yo miramos mal a Sofía.