The Name of Blood - HOTD

XIII

Antes de que el carruaje caminará y que el cielo nublado comenzará a hacerse más oscuro ellos tuvieron una conversación.

- Vuela y habla con Borros Baratheon, esa es tu misión ahora, concreta la propuesta de matrimonio.

- Cuando lleguemos a Desembarco- fue interrumpido en su frase. Daeelyn nego con su cabeza.

- Irás hacia allá, mi viaje hacia la capital durará como menos un día, en ese día tú podrías ser más rápido. Jacaerys estaba aquí, debemos asumir que no hace mucho había partido desde DragonStone. Eres más rápido en Vhagar, ve.

El príncipe no cuestionó, pero no se veía conforme. "Se supone que me enviaron a cuidarte". Pero ella era ahora su reina y su deber era acatar sus órdenes.

Se despidió apropiadamente y emprendió vuelo a lomos de su dragón, ella partió inmediatamente después de él, fue muy poco tiempo después de la partida del príncipe Velaryon, de eso estaba segura.

Sería un viaje aburrido y estresante, a pesar del clima estaba segura que era cerca de medio día, pero las nubes cubrían el sol, habiendo que se viera más tarde de lo que en realidad era.

Se permitió dormir un poco durante el viaje, ahora un poco más relajada.

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El viaje de vuelta a Desembarco fue mucho más corto que el de ida, tal parece que con Vhagar cuidando los Caballeros se habían relajado bastante, pero al no estar la enorme criatura cerca habían hecho lo imposible para llegar al amanecer del día siguiente.

La reina fue recibida en el patio de la Fortaleza y llevada casi inmediatamente a sus aposentos. Tomó un baño y descansó un poco de su mente.

- Demasiado tranquilo para saber que la casa Arryn se ha negado rotundamente a nosotros.

Su voz resonó después de escuchar unos pasos en la habitación, sabía que nadie que no fuera él entraría en esos momentos.

- No fue tu culpa, Luz de Luna, no sabíamos que los bastardos se iban a mover más rápido.

- Aemond asegurará Bastión de Tormentas, estoy segura, Borros Baratheon es un hombre egocéntrico y no cederá fácilmente ante Rhaenyra.

- Mi hermano es hábil - ella asintió con un pequeño sonido.

Los ojos de Daeelyn que habían estado en el agua que cubría su cuerpo durante toda la conversación viajaron hacia su esposo frente a ella.

- Él tendría que haber vuelto ya.

- Lo sé, pero no es algo que no pueda hacer. Confía en él.

Aegon se acercó hasta inclinarse sobre la bañera en la que se encontraba ella. Tomó su mano y la acarició suavemente.

- Baelor lloró todo el día de ayer, no le gusta que yo lea, dice que no soy bueno haciendo eso. Esta acostumbrado a ti.

Ella rió, una verdadera felicidad asentándose en su pecho.

- Le gusta la historia del conquistador, dice que él también quiere empuñar a Hermana Oscura algún día.

Aegon sonrió ante sus palabras.

- La tendrá para él - susurró, con cierto brillo en su mirada.