14. 𝕰𝚕 𝙾𝚅𝙿𝙿 𝚎𝚗 𝕺𝚜𝚝𝚒𝚗𝚊𝚝𝚘

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【𝙱𝚛𝚒𝚕𝚎𝚢】

Morder a Theo en el cuello, dejándole una inocente marca rojiza en lugar de esa horterada púrpura, creó el efecto esperado justo cuando salimos del estudio. La gente gritó un "OH DIOS MÍO" antes de preguntarnos si estábamos saliendo, si yo era ese novio que salió con orejitas de perro, cuánto tiempo llevábamos de relación... No respondimos a nada por conveniencia, pero Theo se pasó todo el camino hasta el coche ─incluida la mansión─ con las orejas rojas como un semáforo y una cara que, en inicio, parecía avergonzada pero en el coche se transformó en una mueca de enfado. 

Gracias ─irónicamente hablando─ al don de Numbus de ser un oportunista en sus comentarios, consiguió ponerlo de peor humor y llevarse un puñetazo que al parecer le hizo un poco de daño. En mi caso, cuando me preguntó, yo sólo aparté la mirada y me escondí en los auriculares para mantener la boca cerrada. 

Tras ese incidente, si lo podemos llamar de ese modo, los siguientes días no pude hacer gran cosa en cuanto parecía tener una oportunidad porque Elvira subía el nivel para que el debut de mitad de mes fuera perfecto. Lunes, martes y miércoles fueron un suplicio en el que incluso dormido llegaba a soñar que ella golpeaba las partituras y me exigía que cantara más alto y me moviera de un lado a otro. En todo caso, fue Theo el que decidió aprovechar momentos puntuales para crear fascinación en su público: En las salidas del coche me apoyaba la mano en la espalda, pero su cara irradiaba molestia; en las ventanas, aceptaba a regañadientes que le diera un chicle o agua con miel para la garganta; en las vueltas para volver a casa, se obligaba a sí mismo a quedarse a mi lado y falsificaba una buena cara para que nadie sospechara en absoluto de lo que estábamos creando.

Sin embargo, el jueves hubo un cambio de normas con las que no contaba. Ocurrió justo cuando Harmony dijo de tomar todos un café afuera y hacer un poco de "tarde normal" para que nuestro teatro fuera mucho más creíble. Me sorprendió que Theo no objetara nada, sobre todo cuando Numbus soltó un burlón "Parece que has perdido fuelle a la hora de parecer interesado, Lyon. ¿Dónde están tus miradas de león que me lanzabas a mí en la intimidad?"

A Thunder se le fue la bebida por un mal lugar y empezó a toser, Tank escupió el café y Harmony se hizo el sorprendido. No hacía falta decir que Cyrus era el alma de la fiesta en el buen sentido, así que te lo veías ahí riéndose bien fuerte para provocar todo tipo de reacciones; tanto en el grupo como en el exterior.

Esa frase fue el detonador para que Theo hiciera un papel un poco más agresivo: Las miradas lobunas que me lanzó esa tarde de alguna manera me hacían sonrojar y me ponían un poco nervioso, ya que parecía más enfadado que loco por mí; los roces casuales a veces creaban nervios bajo la mesa, y los comentarios burlones potenciaban el rubor. Si no fuera todo un ardid, estoy seguro que pensaría que el interés por mí es genuino pero que de alguna manera no sabe ser dulce y amable. Por descontado, eso también levantaban ciertos celos entre algunos fans que gritaban un "Noooo" muy ridículo.

No me gustaba ese contacto. Era tosco.

─¿No puedes ser más dulce? ─le pregunte esa tarde en un tono bajo.

─Soy lo más dulce que puedo ser con alguien como tú ─siseó con los dientes apretados.

A nada estuve de levantarme de la silla, cuando Cyrus se me adelantó y me hizo sentarme de vuelta para susurrarme algo.

─Estás muy tenso, y eso no es bueno para vosotros ─apretó mis hombros con sus manos y el roce de los labios en mi oído fue una bomba para Theo.

Tras ese acto breve, Theo demostró cierto nivel de terquedad para no dejarse ganar por la coquetería natural de Cyrus. Seguía todos nuestros movimientos malhumorado cuando nos tenía a tiro, fruncía el ceño constantemente y apretaba los labios con rabia. Además, me consta que Thunder ha estado leyendo comentarios en las redes sociales, hablando de la proliferación de los chismes y comentarios de los fans que nos han visto juntos. No es precisamente lo que yo tenía en mente, siendo honesto, pero Elvira y los superiores parecen complacidos al ver muchas interacciones con la página oficinal.

𝕭𝚛𝚘𝚔𝚎𝚗 𝕮𝚑𝚘𝚛𝚍 [También en Inkitt]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora