La pequeña celebración junto con el baile fue simplemente un gusto para Aegon, no había nada extravagante y se sentía natural todo de su boda.(Aegon no tenía que utilizar el verde que había aborrecido, no tenía que sentir la mirada de los señores o de sus padres y abuelo en su nuca. No tenía que casarse con su dulce y hermosa hermana)
A pesar de que la celebración fue corta, ya que tenían que ponerse en marcha con sus planes, a Aegon le pareció lo suficiente por el momento.
-¿Te diviertes, esposo?- la dulce Lynna le pregunta al príncipe que se encontraba tomando un vaso de agua.
-Demasiado, esposa.- dice con una sonrisa mientras se sigue maravillando por lo hermosa que está su esposa con aquel vestido y velo Targaryen.
-¿Estás seguro? Cómo estás aquí tomando agua, pensé que podíamos ir a nuestro dormitorio para, ya sabes, divertirnos.- Aegon se sorprende por las palabras de Lynna, pero luego sonríe pícaramente y se acerca a ella.
-¿Qué le paso a mi inocente Lynna que ahora me dice estas palabras tan atrevidas?.- nota como las mejillas de Lynna se ponen ligeramente rosas, pero a pesar de eso tiene una mirada decidida.
-La inocente Lynna quiero que su esposo la haga ver estrellas como solo usted sabe.- dice para darle un beso corto como provocación. Aegon la mira y con la misma sonrisa besa su mejilla.
-Entonces tenemos que ir a nuestros aposentos, cariño.- susurra en el oído de la hermosa mujer, haciendo que esta se estremezcan y asiente con la cabeza.
El deseo de ambos los calienta tanto.
Aegon había llevado a su esposa Lynna a sus aposentos y como habían estado hablando hace unos momentos atrás, ellos consumaron su matrimonio.
Hasta que Laenor interrumpe el hermoso sueño y lo lleva hacia la habitación donde todos estaban reunidos por un mensaje urgente.
-¿Qué sucede?.- pregunto una vez que estuvo en la habitación con el resto. Rhaenyra tenía en sus manos una carta y Aegon sabía que se trataba de la carta que Rhaenys prometió mandar hace cinco días.- Es de Rhaenys, ¿Verdad?.-
-Es de ella.- es todo lo que Rhaenyra dice mientras arruga el papel en sus manos mientras lee, por lo visto no es nada bueno lo que contiene dicho papel.- Rhaenys dice que Daemon se declaró rey, dice que ha estado juntando a señores que lo apoyan y que quiere usurpar el trono cuando mi padre muera...- tal y como Aegon había imaginado antes. Deseaba que lo que había pensado no se hiciera realidad.
-Entonces es claro, una guerra se aproxima.- Laenor tan tenso, observa a todos en la sala, todos tensos ante sus palabras.
-Tenemos que comenzar a movernos.- Aegon dice, ganándose un asentamiento de cabeza de Rhaenyra.
-Jacaerys junto con Daeron saldrán ahora hacia el norte, Aemond y Lucerys vayan a ver a Lord Borros baratheon, Laenor irá a hablar con Lord Caswell y les encargo a los caballeros, Aegon y Helaena, como a todos los que puedan traer a nuestro lado.-
-Como diga, su majestad.-
Con la orden ya dicha, todos comienzan a moverse y hacer lo que Rhaenyra les había dicho que hagan. Jacaerys junto con Daeron, Aemond y Lucerys se habían preparado, habían tomado lo necesario y llevaban los mensajes listos para ser entregados, fue difícil para Aegon verlos arreglándose para volar y no tener noticias de ellos luego de eso. Ellos estarían a ciegas en lo que les suceda.
Antes de que los chicos se vayan a los respectivos lugares, Aegon se acerca a ellos, deteniéndolos y los abraza a cada uno para luego separarse y mirarlos a los ojos.
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Sangre renacida.
FanfictionAegon muere y tiene la oportunidad de volver al pasado, esta vez, él cuidará de sus hermanos menores que claramente necesitan terapia, pero bueno, ¿Quién no la necesita en toda su maldita familia?. Estos personajes no me pertenecen, pertenecen a Geo...