Prólogo [La gota que derramó los vasos]

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Carlos

Hace una semana

—¡Carlos! ¡Carlos! ¿Quién es esa pelirroja con la que estás abrazado?

—¡Carlos! ¿Qué pasó con tu novia? ¿Acaso sabe donde andas?

Los flashes de las cámaras no lo dejaban ver, eso, además de que estaba en un estado de ebriedad completamente. Podía sentir como iba abrazando a la dama que lo acompañaría esa noche y como toda una multitud de hombres le gritaban cosas, no sabía donde estaba su auto, pero él solo quería llegar a la jodida puerta.

Como pudo trataba de avanzar, tratando de no caer, y de proteger a la mujer en sus brazos, era lo mínimo que podía hacer después de meterla en ese embrollo.

—¡Carlos! ¿Dónde se quedó Isa? ¿Acaso se dio cuenta que puede encontrar algo mejor? —Ahí estaban, los comentarios de los paparazzis que siempre hacen para causar una reacción y por consecuente una buena foto, ese fue el comentario que causó la reacción.

Odiaba que siguieran preguntándole por la mujer que lo había abandonado. 

Carlos no supo de dónde sacó tanto coraje, pero soltó a la mujer y como pudo tomó dos cámaras con sus manos, las jaló para después aventarlas por el aire, él normalmente no recurría a la violencia, pero esta noche lo haría. 

Eso fue lo último de lo que se acuerda antes de despertar en su cama, desnudo, sin su compañía de la noche anterior y con un Caco muy molesto lanzándole un vaso de agua para despertarlo.

—Espero que ayer te hayas divertido. —Caco le dijo mientras Carlos se limpiaba el agua fría de su cara.

—Eres un jodido bastardo. —Carlos respondió, luego volteó a su lado, la mujer de ayer ya se había ido, bueno al menos, así él no tenía que correrla mientras le prometía que iba a hablarle de nuevo. 






Victoria

Hace una semana

—¡Victoria! será mejor que respondas. —La agente de la estrella de pop estaba marcando el número de su jefa por quinta vez esa mañana, sin recibir respuesta alguna.

Se había levantado, tomado un baño y preparado algo para desayunar, y justo cuando se había sentado a desayunar y revisar las últimas noticias del mundo de la fama, fue cuando su apetito se fue.

"La caída de Victoria Ellis, la cantante que se ha robado nuestros corazones y roto más récords que nadie este último año, parece ser que no es lo único que ha estado haciendo, pues al parecer se ha visto envuelta en un matrimonio, así como lo escuchan, Victoria Ellis estaba en una relación con el abogado Rogelio Castillo, él cuál tienen más de 5 años de casado."

—Maldita sea, Victoria. —La castaña comenzaba a subir por el elevador de la casa de Victoria esperando que estuviera ahí.

Tocó como desquiciada y quien abrió la puerta era nada más y nada menos el causante de todo este relajo.

—¿Lucía? ¿Todo bien? —El hombre parecía que se acababa de despertar, tenía el cabello negro con el indicio de algunas canas, pero entendía lo que había visto en él Victoria, y no solo ella, su esposa también al parecer.

—Tú no te atrevas a decir nada, entra y llama a Victoria, ¡ahora! —Lucía lo empujó con un dedo mientras cerraba la puerta detrás de ella de un portazo demostrando que no tenía la paciencia para soportarlo. 

—¿Lucía? ¿Qué te trae por aquí? —La rubia salió de la cocina con una playera de hombre con el cabello recogido y nada más.

—¡¿Dónde está tu celular?! ¿Por qué no respondes? —La desesperación de Lucía era palpable, Rogelio no decía nada, parecía que el hombre quería mezclarse con las paredes.

—Uy, lo lamento, lo dejé cargando y en silencio, después de todo, era mi día libre. —No sabía, Lucía lo vió en su cara, Victoria no sabía nada de lo que estaba pasando, y ahí estaba ese idiota viendolas sin vergüenza alguna.

—¿Acaso no le vas a decir? ¿Te quedarás ahí como estatua? —Esas preguntas fueron dirigidas a Rogelio.

—No sé de qué hablas. —Todavía tenía el cinismo de negarlo, Victoria se veía confundida, esperando una explicación de cualquiera de las dos personas frente a ella, jamás había visto a Lucía tan enojada, bueno, sí la había visto así, y sabía que cuando estaba de ese humor era porque algo verdaderamente había sucedido.

La agente sacó su celular y le enseñó twitter, su nombre como tendencia mundial, todas sus menciones estaban por estallar, los memes estaban a la orden del día, las cancelaciones, emojis de serpiente en todas sus redes.

Rogelio no se esperó a nada, tomó su propio celular y vio lo que tenía que ver, ni una llamada de su esposa, pero demasiados mensajes de gente que jamás le habían hablado en la vida, de su trabajo, de su familia.

—¿Rogelio? —Al levantar la mirada se encontró con los ojos llorosos de Victoria, aun con el celular de Lucía en las manos, manos que temblaban.

—En verdad lo siento mucho. —Pero eso fue lo único que pudo decir, porque corrió a la habitación que previamente habían compartido para tomar sus cosas y salir de ahí.

Victoria lo persiguió y consiguió aventarle un vaso que dio con la pared antes de que él se marchara, y esa fue la última vez que lo vio.








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Sé que dije que comenzaría a actualizar, pero me siento generosa este Año Nuevo, así que aquí tienen los dos primeros capítulos

Después comenzaré a publicar cada viernes un capítulo y conforme vayan avanzando irán siendo más largos, lo prometo.

Atentamente 

JavaddMad

Cuando Todo Empeora [Carlos Sainz Jr]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora