- Wow es muy grande Qingqiu-gēge. – Wei Ying no dejaba de virar por cada rincón del lugar
- Mi esposo merece esto y más. – Luo Binghe traía bolsas con comida acompañado de Lan Zhan.
- Este edificio es nuevo, la dueña nos aseguró que a largo plazo valdrá más de lo que cuesta hoy, es exclusivo, con una estructura buena, seguridad, y un plan de mediano y largo plazo de otras dos torres. – Shen estaba encantado con su nuevo hogar
- Ya veo, pensé que tú y Binghe vivirían en la casa de campo que les regaló tu suegro. – Wei Ying veía desde el balcón, estaban en el pent-house .
- Y así era, hasta que mi esposo dijo que debíamos hacernos de nuestro propio patrimonio. – explicó Binghe. – Mi vida ya está la comida
- Vamos a comer algo mientras. – Shen llevó a sus invitados a la mesa
Después de su viaje de bodas, Shen y Luo vivieron un tiempo en la casa de campo que les había regalado su suegro, era enorme y muy cómoda, pero Shen, a pesar de gustarle las comodidades, prefería aún más que las cosas fueran realmente suyas.
No le molestaba vivir en esa casa enorme con todas las comodidades, pero le molestaba conducir 3 horas hasta su trabajo, además de que ya había demasiado en boca de la gente por su matrimonio, no les daría una razón más para hacerlo. Con ello en mente, y los ahorros de ambos, decidieron adquirir su hogar, con sus propias manos.
- No sé cómo te acostumbraste a viajar tanto entre la escuela y tu casa. – decía Shen. – Es demasiado.
- Hmm es incómodo a veces, pero tiene sus ventajas, es difícil encontrarte con problemas vecinales. – contestó Ying
- Es una casa amplia. – comentó Lan Zhan.
- Perfecta para los hijos. – insinuó Wei Ying
- JA JA NI SOÑANDO. – rió Binghe
- ¿Cómo? ¿No tendrán hijos? – preguntó Wei Ying
- ¿Enserio piensas que un niño podrá criar a otro niño? – cuestionó Shen. – Pobres criaturas, estamos bien así
- Por ahora. – dijo Lan Zhan.
- Por siempre, mientras seamos mi esposo y yo, no puedo pedir nada más. – Luo Binghe tomó la mano de su esposo y le sonrió. Y aunque Shen parecía corresponder, había algo extraño en el ambiente.
Wei Ying no podía creer que sus amigos hubiesen decidido no tener hijos. Él pensó entonces, que si se casaba, claro que querría tener uno o dos mini Lan Zhan corriendo por su casa.
- Oh, es mi madre, permiso voy a contestar. – Wei Ying salió al balcón y respondió la llamada. Lan Zhan lo veía desde lo lejos, llamando la atención de los otros dos, ese hombre estaba perdidamente enamorado.
- ¿Y? ¿Cómo van las cosas? – preguntó Binghe
- Bien, estamos bien. – contestó Lan Zhan
- Me alegra, no te atrevas a romperle el corazón a mi dìdì. – amenazó Qingqiu. – Hua Cheng no tardará en llegar, quizás traiga a Xie Lian
- Cuando se harán novios esos dos. – dijo Binghe
- Van a su paso. – contestó Lan Zhan aun viendo a Ying
- Un segundo, olvidamos el picante para Ying. – Qingqiu se levantó
- Yo iré. – Binghe se apresuró a levantarse, pero su esposo lo detuvo
- Basta, pensarán que no hago nada en casa y me mimas demasiado. – dijo Qingqiu, sabiendo que era cierto.
Una vez que la mesa se quedó solo con Binghe y Zhan, este entonces hizo una pregunta más indiscreta que sabía que el Lan no respondería con Ying y Qingqiu escuchando.

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Deudas de Sangre
FanfictionUn secreto, dos familias separadas, la lealtad, la amistad y el amor. Los Lan y los Wei son enemigos debido a un mal entendido entre Cangse Sanren y Lan Qiren, y es que como su mejor amiga de este tenia que ayudarlo. ¿Pero que tiene de importancia q...