Deudas de Sangre

XXII. Deseo que...

- ¿Te das cuenta de lo que es esto? – Baoshan tenía el papel en sus manos

- No es como si haya cometido un gran delito mamá, cálmate. - Xiao Xingchen trataba de controlar la ira de Baoshan

- ¿Y tú no vas a decir nada? – preguntó Baoshan a su hija mayor

- ¿Qué te puedo decir? Mi hijo tiene mente de tiburón.

Wei Ying había llegado a su casa de visita con la sorpresa de que la escuela había enviado una llamada de advertencia como parte de una solicitud disciplinaria, ya que había roto las reglas de nuevo. Lamentablemente su abuela había estado allí en el momento en que su madre abrió la carta y ahora estaba furiosa.

- Mi vidaaa~ traje pastel y a Fengmian. – anunció Changze su llegada

- ¿¡Cómo puedes decir eso cuando Wei Ying está siendo reprendido por mala conducta?! – se escuchó el grito de Baoshan

- Mi vidaaa~ me voy con el pastel y Fengmian. – Wei Changze tomó a Jiang Fengmian y al pastel y huyeron mientras pudieron

- Hijo, no puedes vender cosas en tu escuela y lo sabes, firmaste un acuerdo. – regañó Cangse Sanren. – Debiste venderlos fuera de la escuela

- ¡Sanren! – regañó Baoshan a su hija

- Lo siento, sólo quería dinero extra. – dijo Ying apenado

- ¿Qué necesitabas A-Ying? – Xingchen era el más razonable allí

- Es que me terminé mi mesada... - confesó Wei Ying apenado

- Lo vez mamá, solo se le terminó su... ¡Qué! – Sanren ya no estaba tan feliz. - ¿¿Cómo pudiste terminarte la mesada si no estamos ni a mitad del mes??

- Es que hubo una compra de emergencia. – Wei Ying se estaba preparando para huir

- ¿Qué compra fue esa? – Xingchen le daba el espacio seguro para que Ying contara la verdad. – Tranquilo, estoy seguro de que debió ser algo realmente urgente para gastarte el dinero, mira, ni tu mamá, ni la abuela ni yo nos vamos a enojar, solo dinos la verdad A-Ying

- Bien, la comida en Cloud Recesses es tan insípida que quise comer algo afuera, así que lo gasté en comida, además necesitaba unas cosas de baño nuevas... - explicó Ying

- Bueno la comida y los artículos de aseo son algo necesario... – Xingchen le sonrió a su sobrino

- Y una alcancía de ¥300 en forma de burro. – agregó Ying congelando la sonrisa de su tío

- Lo ven una alcancía... de... burro... - Xingchen ya no podía defender más a su sobrino. – Ay A-Ying

- ¿¿¡Cómo pudiste gastar ¥300 en una alcancía en forma de burro!?? – le gritó Cangse Sanren

- Es una alcaburro mamá, así podré ahorrar dinero y no me faltará. – Ying se puso en posición

- Oh claro. – Sanren fingió entender. – Ven hijo mío, yo te voy a enseñar ¡a ahorrar!

- ¡Espera mamá! – Wei Ying salió disparado de su sofá. - Se come las monedas y los billetes por la boca. – Ying esquivó a su madre. Ambos corrían alrededor del sofá. – Y si le jalas la cola escupe el dinero

- ¡Eres un pequeño despilfarrador! ¡¿A caso crees que voy a darte dinero cada vez que quie...!? ¿Escupe el dinero cuando jalas la cola? – Sanren se detuvo y visualizó la alcancía en su mente