Camina por los pasillos aún abrumada por todo lo que pasaba con Jackson y Derek. Opte por hacerle caso, no quiero problemas.
Mientras caminaba hacia mi casillero para caminar de libros, en medio del camino choque con alguien que salía de una aula, todos mis libros volaron de mis manos para caer al suelo.
Me agache para recoger todo y unas manos se unieron a ayudarme. Unas manos que conocia muy bien. Me levante con la mayoría de libros en mis manos y las otras manos se extendieron entregándome sus libros.
-Hola, Evelyn. -saludó el moreno. Le arrebate los libros a Scott y salí corriendo de su vista. Seguramente estará confundido pero no me importa.
Llegue agitada a mi casillero y guarde las cosas para sacar las otras.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Me monte en mi auto encendiendo y corriendo enseguida para ir a mi trabajo. Ya tenía cinco minutos tarde y tendría que los cinco dólares a Scott.
¡Scott! Mierda, había olvidado por completo que trabajaba con él. Al carajo. Ni se porque demonios le estoy haciendo caso al tonto de Derek. Si no le hago caso a mi madre. ¿Por que demonios sí a un lunático que me mordió?
Sin darle más vueltas al asunto, arranque el auto finalmente y presione el acelerador hasta el fondo, ignorando por un rato las leyes. La flechita llegó hasta 100 km/h.
Al llegar a la veterinaria, pude divisar la bicicleta de Scott estacionada en la acera. Gruñí y golpee el volante enojada. Me baje del auto refunfuñando en voz baja y me adentré al lugar.
Cuando entre no noté a Scott por ningún lado. Suspire y me dirigí a Deaton que estaba en la recepción. Por alguna razón no lo había visto cuando entre.
-Scott no está, si es lo que te preguntas. -respondió el doctor a mi pregunta mental.
-¿Eres acaso una bruja? -pregunte en broma poniendo mi mano en mi pecho para poner mas drama.
-No, soy veterinario. -respondió con simpleza.
-Ah, wow, no me había dado cuenta. Gracias por informármelo. Ya casi te creí IronMan. -dije sarcásticamente y el doctor río.
-Creí que me creías bruja.
-También. -dije recostándome en la mesa de recepción. Deaton volvió a reír-. ¿Donde esta Scott?
-Con su novia.
-¿Scott tiene novia? -pregunte asombrada ante esa información.
-¿No sabías? Creí que habías dicho que sabías todo sobre todos. -se cruzó de brazos sobre su pecho.