cigarette 𖦹 isaac lahey ✓

𝗲𝗶𝗴𝗵𝘁. 𝓴atashi

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✩ˑ ━━ ❛ 𝓒𝐇𝐀𝐏𝐓𝐄𝐑 𝓔𝐈𝐆𝐇𝐓 ❜ ┊ೃ
¡ 𝓴atashi !

Isaac le contó todo a Scott. Fue cuando él decidió ir con el padre de Allison para responder a la pregunta; ¿Qué rayos era eso?

Juntos salieron del loft para ir al departamento de la cazadora. Evan hizo un de seguirlos pero una negación de mi parte fue suficiente. Aunque claro, él no le gustó la idea de Scott y Allison solos y juntos. Solo apretó la mandíbula con molestia, sin decir nada más.

—¿Estuvo buena la fiesta? —todos nos tensamos al oír al dueño del lugar.

—Uh, nosotros... nosotros debemos irnos. —murmuró Evan señalándonos a nosotros tres.

Derek entrecerró los ojos hacia nosotros. No supe cómo interpretar aquello. ¿Estaba molesto? ¿Feliz? ¿Extrañado? ¿Familiarizado..? No, eso no. La verdad es que Derek mantenía la misma expresión para todo.

—¿Pa..? —abrí los ojos en grande y cerré la boca de inmediato sin terminar lo que iba a decir—. ¿Peter está bien?

Derek, suavizó un poco la mirada —solo un poco— y asintió levemente. Pude sentir la calma invadiendo como cuando fumaba y el humo se expandía en mi sistema, dándome una tranquila sensación.

—Vendría, pero creo que tiene cosas más importantes que hacer. —me miró fijamente para ver mi reacción.

Quise contenerme, pero mi rostro decayó al oír aquello. Solo un poco, ni se notaba. Asentí también, tratando de fingir una sonrisa que más bien pareció una mueca. Al menos estaba bien, eso era lo que importaba.

Pero no estaba de más un gracias, ¿no?

Con Isaac y Evan detrás, salimos del loft sin decir una palabra. Gracias al cielo no dijeron nada del ocurrido.

Los odiosos de atrás comenzaron a pelearse por quien iría adelante esta vez. Evan se quejó de que Isaac siempre iba adelante, y que no le parecía justo. Mientras que Isaac se defendía con que era el novio y tenía preferencia. De modo que decidieron hacer una carrera y el que llegara primero al asiento de copiloto; ganaba.

Giré los ojos al verlos pelear como niños. Realmente no tenía cabeza para eso y no dije nada al respecto. Solo dejé que siguieran jugando.

Al final, Evan ganó al tener más fuerza como Alfa. Isaac se fue al asiento de atrás refunfuñando e insultando en voz baja a Evan, con toda la intención de que mi copia idéntica lo oyera.

Suspiré y negué levemente, pensando lo ridículos que eran los dos.

Al llegar a casa, corrí al cuarto que compartía con Isaac y me tiré a la cama para relajarme un rato. Tenía muchas cosas en que pensar y la pelea que ahora Isaac y Evan estaban teniendo por quien se había comido el último chocolate.

Había sido yo, pero ellos no necesitan saber eso.

Mis párpados comenzaron a pesarme, y los cerré completamente, para caer en un profundo sueño.

Uno profundo pero corto. Parecieron cinco segundo. Ya que al quinto segundo la alarma comenzó a sonar sin control alguno. Estaba apunto de patearla cuando dejó de sonar. Gracias a Dios.