cigarette 𖦹 isaac lahey ✓

𝘁𝘄𝗲𝗻𝘁𝘆-𝘁𝘄𝗼. 𝓯inal 𝓫attle

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✩ˑ ━━ ❛ 𝓒𝐇𝐀𝐏𝐓𝐄𝐑 𝓣𝐖𝐄𝐍𝐓𝐘-𝓣𝐖𝐎 ❜ ┊ೃ
¡ 𝓯inal 𝓫attle !

-Esto es aburrido. -comente absorta en la oscuridad, dejando escapar el humo que yacía en mis labios.

-Tal vez si dejarás esa porquería dejarías de estar aburrida. -gire los ojos al oír las palabras de mi supuesto padre.

Fue entonces cuando una camioneta se estacionó a una distancia prudente de nosotros. De ese auto salieron Scott y Isaac junto al padre de Allison. Algo que me dejó perdida al verlo allí, junto a los dos hombres lobos.

Hice un además de acercarme pero Derek se me adelantó y corrió hacia ellos en cuatro patas, como un perro.

-A alguien le gusta mucho entrar con estilo. -murmuró con sarcasmo.

-No puedo creer que esa cosa es mi primo. -bufé y camine también hacia donde ellos se encontraban.

Corrí a los brazos de Isaac y este me atajo en segundos, revisando de reojo para ver si estaba bien. Apartó con cuidado mi cabello para ver la herida de mi nuca que Peter había hecho.

-Desapareció. -dijo con falsa sorpresa.

-Que extraño. -bromeé igual y él me sonrió.

Ahora dirigí mi mirada hacia los otros tres. -Vine por Jackson, no por ti. -informó el cazador con la mirada seria y una voz ronca.

-Temo decirte que eso no me consuela. -devolvió Derek-. Llévenlo adentro. -mandó y los tres asentimos a su orden.

Sin soltar la mano del rubio, caminamos juntos a donde Jackson yacía, dentro de una bolsa, tirado en el suelo.

-¿Donde están? -preguntó Scott.

-¿Quienes?

-Peter y Lydia. -Derek lo ignoró para abrir la bolsa de Jackson, desoyendo las palabras de Scott-. ¡Evelyn! -me grito molesto-. ¡Lo va a matar y tú... ¿tú no harás nada?! ¿Después de que dijiste que lo protegerías a toda costa?

Gracias Scott, me siento como una traidora ahora.

-Scott... -intente responder a eso pero Derek me interrumpió.

-¡Solo piénsalo! Gerard lo controla ahora. Hizo de Jackson su propio perro guardián. Él puso todo esto en movimiento para que Jackson sea más grande y más poderoso.

-No, él no haría eso. -negó Argent ante las palabras del alfa-. Si Jackson es su perro ya está rabioso. Y mi padre no dejaría un perro rabioso vivo.

-Claro que no. -entonces la voz de ese anciano que me causaba tanta rabia se hizo presente en el lugar-. Algo así de peligroso y fuera de control debe morir.

Y entonces todo cobro sentido. Gerard estaba aquí. Al igual que Jackson y Derek. Lo que significaba una cosa.

Que Derek iba a morir esta noche.

-¡Espera! -hice un intento de acercarme a Derek pero él fue a clavar sus garras en la garganta de Jackson. Pero este despertó inesperadamente ya transformado y con furia inexplicable, clavó sus garras en el pecho del alfa para alzarlo y lanzarlo al otro lado de la habitación donde desapareció entre las cortinas de plástico.