cigarette 𖦹 isaac lahey ✓

𝘁𝘄𝗲𝗻𝘁𝘆. 𝓯rom 𝓵ife 𝓽o 𝓭eath

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✩ˑ ━━ ❛ 𝓒𝐇𝐀𝐏𝐓𝐄𝐑 𝓣𝐖𝐄𝐍𝐓𝐘 ❜ ┊ೃ
¡ 𝓯rom 𝓵ife 𝓽o 𝓭eath !

Stiles y Deaton habían dejado la veterinaria para reunirse con Scott. Dejándonos a Allison, Isaac y a mí solos en el lugar.

Isaac se mantenía siempre a mi lado, sin siquiera dirigirle una mirada a la cazadora. El mismo me había confesado momento atrás que aunque quisiera, por mi, no le era posible verla como alianza. Aún se estaba resentido por lo que había pasado meses atrás.

Allison mientras tanto caminaba por la veterinaria, observando su teléfono. A veces, nos echaba rápidas miradas que desviaba enseguida. Suspira pesadamente al despegar la mirada de nosotros.

—¿Está todo bien? —le pregunté con una leve sonrisa. Su inquietud me inquietaba.

—Sí, no es nada. —me miró rápidamente antes de agachar la mirada.

Asentí no muy convencida ante eso. Ella estaba actuando muy extraño y no era por lo que pasó con su padre. Había angustia pero también frustración y desesperación. Como había dicho, este sentimiento no era por su padre.

Isaac también lo había percibido, pero no quiso decir nada. Su mirada, con su ceño fruncido hacia Allison, lo decía todo.

—Eve...

—Stiles me dijo que te habían electrocutado. —Evan entró a la veterinaria con potencia, sobresaltándonos a todos, y con su llegada interrumpió lo que Allison iba a decir—. ¿Es eso cierto? —preguntó Evan, apretando mis mejillas entre sus manos, mostrándose con una mueca preocupada.

—Está bien. —habló Isaac alejándolo de mi—. Aparte.

Evan lo miró con desagrado.

—Es mi hermana, Lahey. Estoy en todo mi derecho estar cerca de ella cuanto me apetezca. No es de interés que yo te agrade o no. —el ojiazul lo miró seriamente al decir aquello.

Hubo un duelo de miradas entre los hombres lobo. Ninguno se atrevía a parpadear. Suspiré cansada de su comportamiento de niños chiquitos.

—Suficiente. ¿Qué estás haciendo aquí? —le pregunté a mi doble (malvado).

—Stiles dijo que era urgente. —respondió despegando su mirada de Isaac para ponerla sobre la veterinaria—. Que se habían llevado a su padre y al de... —no terminó la frase, su respiración se atascó en su garganta al ver a Allison allí también.

Mi ceño se frunció al notar como ambos corazones se habían alterado, golpeando con ímpetu y frenesí sus pechos.

Tosí falsamente para sacarlos de su tonto trance. Ellos enseguida apartaron la mirada del otro. Allison no se atrevió a mirarme pero pude notar sus mejillas sonrojadas. ¿Qué demonios estaba ocurriendo?

Antes de que pudiera preguntar algo, Deaton había hecho presencia con Stiles, Scott y... Lydia detrás. Ella se detuvo en seco al verme, y al mismo tiempo tensamos la mandíbula. Lydia huyó a un lado de Allison.