༄ ꪻ᥅ꫀᥴꫀ

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• sᴀɴɢʀᴇ

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• sᴀɴɢʀᴇ

OTRA VEZ LAS CAMPANAS SONABAN PERO ESTA VEZ FORMABAN una dulce melodía así que comenzó a caminar hacía el orígen del sonido encontrando una habitación dónde había un espejo, pudo ver su reflejó pero al observarlo se asustó al darse cuenta que traía un vestido blanco con bordados de flores pero más importante traía su capa de donzella puesta.

Al voltear estaba otra vez en el gran salón viendo a muchas personas pero eran solo mujeres de hecho todas tenían facciones iguales a ella fue cuando pudo reconocer a algunas por los libros de historia.

Daenys Targaryen quién predijo la destrucción de Valirya estaba dándole una sonrisa entre felicidad y pena.

Rhaenys la segunda esposa de Aegon el conquistador ella le estaba sonriendo.

Alysanne Targaryen, esposa del rey Jahaerys la observaba con orgullo.

Daella Targaryen hija de Jahaerys  tenía una pequeña sonrisa por un momento le recordó a Halaena.

Y finalmente Aemma Arryn su difunto tía estaba frente suyo acariciando con amor su mejilla.

- Despierta mi pequeña nosotras te estaremos cuidando - susurra con dulzura la mujer

En seguida abrió sus ojos violetas con algo de asombro pero esa emoción se fue al sentir algo húmedo estre sus sábanas, las retiró de su cuerpo encontrándose con sangre en la tela de su camisón.

Su madre le había explicado que era el sangrado pero nunca creyó que podría llegar tan temprano en seguida se asustó al verlo pero luego pudo recordar su sueño así que cerró sus ojos, respiro tratando de calmarse y al conseguirlo otra vez abrió sus ojos.

La puerta fue abierta dejando ver a su padre contento pero al verla en seguida sus facciones cambiaron para ser de angustia.

- Papá... - susurró la menor

- Tranquila mi niña solo respira en un momento regresare - dice Daemon saliendo del lugar

Hizo lo que su progenitor le indicó mientras trataba de recordar las palabras de su madre sobre que debía hacer en su primer sangrado así con cuidado se paro empezando a agarrar las sabanas manchadas para que sean limpiadas pero luego la puerta fue abierta nuevamente dejando entrar al principe canalla.

- Yo lo hare ve a limpiarte - dijo dejando un beso en su cabeza

Ella solo asintió agarrando todas las cosas necesarias para poder limpiarse al igual que las telas para poder impedir que su sangre manche sus vestidos pero al limpiarse y arreglarse soltó pequeñas lagrimas según lo que había oído cuando eso pasaba dejabas de ser una niña para convertirse en una mujer, no quería ser una, deseaba seguir siendo una niña.

Al terminar se limpio las lagrimas saliendo del cuarto de baño viendo que su cama tenia nuevas sábanas pero al ver a su padre en seguida fue hacia los brazos de el soltando pequeñas lagrimas.

- No quiero ser una mujer - susurra con una voz entrecortada

- Y no lo seras luna de mi vida por que sera un secreto nadie mas que nosotros dos y Rhaenyra puede saberlo - hablá de una forma seria pero suave

La infante solo asintió mientras sentia como sus lagrimas eran retiradas por el toqué delicado por parte de su padre.

- Principe - hablá una notriza entrando - Su presencia y la de su hija es necesaria en el salón de tronos -

Padre e hija agarrados de la mano comenzaron a caminar mientras el caballero Barnes hiba detrás suyo pero al entrar todas las miradas calleron en ambos dragones.

- Hoy he tomado una gran decisión - comenzó a hablar el soberano - Una que definirá el futuro de la casa del dragón -

Fue cuando Nyra sintió que algo no estaba bien era como aquel sentimiento cuando su madre murió.

- Hoy he decidido con quién casare a mi hijo Aegon - habla el soberano - Con mi sobrina Dhaenyra Targaryen, cuando ella comienze a sangrar ser el inició de los preparativos para la boda -

Dos... dos veces que veía lo que sucedería y no pudo evitarlo primero la muerte de su madre y ahora su compromiso con su primo, la menor se quedo quieta mirando un lugar fijó mientras que Daemon estaba furioso.

- ¿No podías preguntarme antes? - cuestiona furioso el principe a su hermano - ¿¡Ya no importa que sea el padre de ella!? -

- ¡Ten mas respeto hacia tu rey! - grita Viserys

- ¡Tu deberías de tenerlo! ¿¡Como se te ocurre comprometer a mi hija sin siquiera preguntame!? ¡Ella es mi hija! - hablá enojado el dragón canalla

- ¡Es suficiente! - dice el soberano levantandose del trono de hierro mirando a su hermano menor con enojo - ¡Ya he tomado una desición y tu ni nadie puede ir en contra de eso! -

- Es una niña - hablá severo Daemon - Es mi niña y tu ahora quieres separarla de mi lado ¡Ella es una soñadora no puedes casarla con cualquiera!  -

Todos en el salón quedaron callados por saber que la menor podía ver el futuro, todos vieron a la niña quién seguía viendo un punto fijo pensando en su último sueño así que simplemente agarró el brazo de su padre.

- Quiero ir a casa - dice sin ninguna emoción

Fue cuando ambos dragobes se calmaron y nuevamente Viserys se sentó en el trono de hierro cansado pero también tratando de procesar que su sobrina sea una soñadora.

- Regresaran al anochecer con todas las pertenencias de Dhaenyra ella quedara a cargo de la reina y quiero que a su regreso venga a mi cuarto necesito hablar con ella - informá con una voz algo cansada

Sin más el principe canalla se llevo rapidamente a su hija sin dejar que ella pueda ver el rostro feliz de Aegon, Otto y Alicent al igual que la mirada de tristeza que tenía Halaena al saber que su prima estara con alguien que no ama y sepan su secreto.

El barco sarpo dirigiéndose a roca dragón mientras padre e hija estaban por los cielos disfrutando sus últimos momentos juntos antes de que la menor quede encerrada entre esas enormes cuadro paredes con serpientes a su alrededor sabiendo su más grande secreto, bueno el primero de muchos.


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