NADIE PODRÁ EXPLICAR CUAN FELIZ ESTABA LA PRINCESA RHAENYRA EN CUANTO vio a su amada hija Dhaenyra y más cuando vio a sus dos nietos quienes eran como los había descrito su esposo Daemon quien en seguida comenzó a jugar con sus nietos.
- Mi dulce niña - dice contenta la heredera al trono mientras acaricia el rostro de su única hija
- Te extraño mucho madre - habla la platinada
- Y yo más mi niña - dice con felicidad
Las puertas fueron abiertas dejando ver a dos príncipes Velaryon quienes en seguida sonrieron al ver a su hermana quien en seguida abrió sus brazos para que ambos fueran a abrazarla algo que ellos en seguida hicieron.
- Te extrañamos - dice Jace con una sonrisa
- Demasiado - comenta Luke viéndola con una sonrisa
- Yo igual, ya extrañaba que alguien acompañará a copo - dice refiriéndose a su conejo - O dejar que se hagan peinados-
Todos ríen ante ese comentario, la familia estaba unida de nuevo algo que alegraba el corazón de la joven princesa con su barriga de ya tres lunas de embarazo.
- Princesa - dice Sir James entrando dando una reverencia - El entrenamiento esta a punto de empezar -
- ¿Entrenamiento? - dice curiosa Baela
- Oh si, Baelon y Alyssa tienen un entrenamiento especial para que su vínculo con sus dragones se fortalezca - explica siendo ayudada por Lady Anastasia a levantarse
Algo que sugirió Aemond, el príncipe creció sin un dragón y se aseguraría que sus hijos sean los mejores jinetes de dragón que han existido así que sugirió que ambos infantes tengan un entrenamiento temprano para que el vínculo entre jinete y dragón sea tan fuerte que aunque después de su muerte sus dragones no serán domados por alguien más que sus originales jinetes.
Una idea que ella tuvo que decir al ser la madre de ambos niños y que fue apoyada por él ya que Alicent se le hacia una idea demasiado peligrosa y bueno Aegon en su momento se sobriedad dijo que estaba de acuerdo ya que sus hijos merecían lo mejor y eso lo era.
- ¿No es demasiado? - cuestiona Lucerys
- Para nada - dice Daemon cargando sus nietos - Ambos son dragones y mientras aprendan más rápido a domar a sus dragones será mejor -
Nyra con ayuda de Anastasia fue caminando hacia una de las salas donde estaban dos dragones que estaban volando por todas parte, parecían niños que aprendieron a comer e iban de una lado a otro así que todos estaba sonriendo ante esa imagen y más los pequeños quienes extendían sus manos en busca de sus dragones.
El dragón de Baelon tenía escamas amarillas casi doradas como Dhaegar y unos bellos ojos oscuros, el pequeño entre sus balbuceos lo llama Veriox.
El dragón de Alyssa era de escamas casi blancas y unos bellos ojos oscuros iguales al de Veriox, pero con un cuello y cola largas como Caraxes por eso entre los balbuceos de la pequeña lo llamo Aracxes.
[ 🔮]
L
A CENA Y LOS MESES EN REALIDAD FUERON DE LOS MAS NORMALES QUE PUDIERON ser debido al conflicto que hay en la casa del dragón los integrantes se evitaban los unos a los otros, pero todos ellos estaban de acuerdo en cuidar de Dhaenyra sobretodo ahora quien estaba con ocho lunas de embarazo y en todo ese tiempo sus hermanos, hermana, padres y bueno en realidad todos estuvieron pendiente de ella y de sus hijos quienes estaban más que encantados de tener la atención en ellos.
- Con cuidado - dice Aemond ayudándola a bajar las escaleras - No quiero que sea como la última vez que lo hacías descalza -
- ¡Nyra te estuvimos buscando! - dice Jacaerys bajando las escaleras
El príncipe Targaryen y el príncipe Velaryon se vieron por unos segundos, ambos sin estar dispuestos a bajar la mirada y ser intimidado por el otro.
- Lo siento Jace, es que fui con Halaena al jardín usualmente vamos ahí para leer además de que Aemond se ofreció a acompañarme - explica la peliblanca con suavidad
- Entiendo, pero deberías avisar donde estás por poco y pensábamos que te habías ido con Dhaegar - dice el Velaryon
- No entiendo porque Dhaenyra debería avisarte donde se encuentra - opina el Targaryen - Ni siquiera Ser Barnes se preucupa tanto como tú por Dhaenyra, sobrino -
Aemond, él era un príncipe celoso, la belleza y dulzura de Dhaenyra podía cautivar a cualquiera, eso hizo con él por eso sabía muy bien que varios guardias como gente noble e incluso los mismos súbditos podían suspirar con tan solo verla de reojo porque la amabilidad de la joven no era un secreto para nadie, pero al final a pesar de que Aegon estaba en su camino, Dhaenyra estaba a su lado, no como una propiedad si no por voluntad propia ya que ella lo escogió y eso lo hacía llenar de orgullo ya que el fue elegido por ella, no por obligación o algo parecido si no que fue una elección propia.
- Dhaenyra se convirtió en mi hermana desde que mi madre y su padre se unieron en matrimonio - explica Jacaerys con la cabeza en alto - Y es mi deber como hermano mayor cuidar a mi hermana y más aun que esta en cinta -
La nombrada sonríe enternecida ante las palabras del Velaryon tanto que beso con delicadeza su mejilla.
- Gracias Jace, pero por el momento no debes de preocuparte - dice con suavidad viéndolo - Estaré bien además créeme no estoy ni un momento sola -
Sin más comenzó a caminar de nuevo con ayuda de Aemond quien le sonrío a su esposa, era muy cierto que en ningún momento estaba sola, incluso durante las noches el joven príncipe Targaryen estaba ahí con ella velando su sueño y el de sus hijos quienes les gustaba pasar tiempo con su padre mientras jugaban con su largo cabello y dejaban sus cabezas recargadas en la barriga de su madre.
- ¿Te encuentras bien? - dice el peliblanco dejándola en su cama - ¿Necesitas algo ñuha dōna ābrazyrys? -
Ella niega con la cabeza besando con dulzura los labios de su esposo quien corresponde con felicidad. No era un secreto entre ambos que sus noches eran bastante, curiosas debido a la adoración que sentía el Targaryen por Dhaenyra quien estaba dispuesto a hacer de todo con tal de complacer a su esposa.
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༻ • . ᦓ᭙ꫀꫀꪻ ꪻꪖ᥅ᧁꪖ᥅ꪗꫀꪀ . •༺
Fanfiction᯽𝖲𝖶𝖤𝖤𝖳 𝖳𝖠𝖱𝖦𝖠𝖱𝖸𝖤𝖭 || El funeral de Laena Velaryon fue un suceso triste, pero en el evento se pudo ver a su hija mayor: Dhaenyra Targaryen.