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Ya eran las 6:15 de la mañana y yo no había logrado dormir.

Decidí levantarme de la cama y hacer el desayuno.

Fui a la cocina y preparé unos sandwiches de tomate, lechuga, salsas y jamón.

Luego, preparé un jugo de naranja y lo guarde para que se mantuviera frío.

Tapé lo sandwiches y volví a la cama.

Miré a Lauren mientras dormía y comencé a acariciar su cabello.

Ella se despertó y se estiró.

-Buenos días, princesa-dije imitando lo que ella me decía cada vez que despertaba.

-Oye, ese es mi diálogo-se quejó sonriendo-buenos días.

Le sonreí y le di un beso rápido en los labios.

Cuando intenté alejarme, ella me tomó del cuello y me besó lenta y apasionadamente.

-Llevo casi 3 dias sin besarte, ¿Y te vas a ir sin darme uno de verdad?-preguntó.

-Pensé que no iba a gustarte-dije mientras ella jugaba con mi cabello.

-Nunca te negaría un beso-dijo y comenzó a bajar su mano a mis pechos.

-Lauren, no-dije riéndome-no hemos comido y nuestra boca huele horrible.

-Pues nos comemos entre nosotras-dijo sonriendo.

-Laur, vamos a desayunar-dije cortándole el rollo.

Ella solo se mordió el labio inferior y se levantó para ir a cepillarse los dientes.

Yo puse un plato para ella y otro para mí aparte.

Ella salió de la habitación y se sentó en el mesón.

-Yo planeaba hacer esto hoy-dijo metiéndose un pan a la boca-está bueno-dije y tomó un sorbo del jugo de naranja.

Yo solo le sonreí y comencé a comer en silencio.

-Camz, ¿Te pasa algo?-me preguntó preocupada.

-No logré dormir bien-dije y Vi como bajo la mirada-no fue por ti-dije animándola-es que estaba algo estresada por todo lo que sucedió, de echo, antes de lo que te pasó anoche no lograba dormir.

-Camila, se que fue porque temías que volviera a pasar-dijo mirándome a los ojos.

-Dios, Lauren cállate-dije-estaba estresada-dije y comencé a comer.

-Okey, ya entendí-dijo y siguió comiendo.

Luego de desayunar, lavé los platos y encendí la televisión de la sala.

-Camz, ¿Puedes venir?-me llamó Lauren desde la habitación.

Entré y ella me indicó que me sentará sobre la cama.

-¿Porque me seguiste ayer?-preguntó.

-Lauren...-me quejé.

-Solo dime-habló sería.

-Lauren, el comportamiento que tenías no era algo de lo que yo pudiera decir que era normal-dije soltando un suspiro-te desahogaste conmigo, me contaste tus problemas, lloraste frente a mí, ¿Que esperabas que hiciera? Tenía que saber que era lo que te traía tan triste.

Lauren me miró  con tristeza.

-Camila, pudiste haber muerto ahí-me regañó-¿Porque no solo dejaste que...?

-¡Porque te amo, Lauren!-dije con la respiración agitada-todo este maldito tiempo te estuve viendo como una amiga, pero me enamoré de ti, me preocupé por ti, temía que te pasara algo, temía que pudiera perderte, Lauren, lo eres todo para mí y no sabes lo que me dolía verte en el sofá llorando, lo que me dolió verte en ese cuarto llorando en una esquina. No sabes cómo se me hizo añicos el corazón cuando te encontré anoche llorando en la esquina de la habitación... Lauren te volviste importante para mí, ¡Tu me gustas, Lauren! No sabes lo que me dolía verte tan desesperada, tan triste y tan desorientada. Lauren yo...

Friends with Beneficies | CAMRENDonde viven las historias. Descúbrelo ahora