Desabrochó mi cinturón mirando hacia la enorme casa de mis padres. Lauren desabrochó su cinturón y se giró a verme soltando un suspiro.
-¿Segura quieres hacerlo?-preguntó y la miré antes de abrir la puerta del coche-no voy a forzarte a que lo hagas.
-Lauren, no tengo problema-dije y le sonreí-solo me molesta que no me hayan dicho que mi madre estaba viva. ¡Hasta le hubiera dado las gracias!
Lauren me sonrió y desbloqueo la puerta del coche para poder salir de este.
Me acerqué a la casa con pasos lentos y mirando al suelo. Esta no era la casa donde yo había crecido, o al menos no la recordaba con claridad. Solté un suspiro cuando estuve frente a la puerta y toqué unas 3 veces.
La puerta se abrió dejándome ver a una chica un poco más baja que yo, juro que casi lloré. Sofi estaba mucho más grande de lo que pensaba. ¿Se acordará de mi? Solo tenía 7 años cuando me fui.
-Kaki...-susurró y sus ojos se cristalizaron.
Me agaché a su altura y la abracé sintiendo mi camisa ser empapada de lágrimas.
-¡Sinuh! ¡Papá!-gritó y nos dejó pasar- ¡Ya llegaron!
Mi madre bajó las escaleras junto a mí padre para abrazarme, olvidé por un momento que necesitaba hablar con mi madre solo para sentir ese abrazo que llevaba más de 2 años sin sentir. Me limpié las lágrimas y los miré sonriendo.
-Que alegría volver a verte, Mila-dijo mi madre y me reí, estaba feliz de que estuviera bien, al menos podría verla otra vez.
-Yo sigo molesta con mamá-dijo Sofi cruzada de brazos-no dijo que vendrías.
Nos reímos y mi madre nos invitó a la sala para conversar. Contamos chistes, comimos, les hablé de mi relación con Lauren y todo fue de maravilla hasta que recordé.
-Madre-dije y la miré seria-¿Porque me ocultarse que estabas bien?- pregunté y ella abrió los ojos y se tensó mirando a Sofi quien estaba confundida-es decir... ¿Como no paso por tu cabeza decirme que ibas a mi boda?-dije y se calmó.
-Fue idea de tu padre-dijo y mi papá la miró con indignación.
-¿Yo? ¡Lauren me llamó!-dijo y nos reímos.
Pasamos la tarde contando chistes y molestando a Sofi, salí de la casa a el patio trasero donde había una enorme piscina.
-Sigues molesta, ¿Verdad?-escuché la voz de mi madre detrás de mí y me volteé a mirarla-no te culpo, hija.
Mi madre se sentó a mi lado y me sonrió para luego volver su vista a la piscina.
-No estoy molesta-dije y la miré-solo quiero saber porque me lo ocultaron.
-Puedo imaginarlo-dijo y tomó mi mano derecha-escucha, Mila, yo podía salir de allí con solo dos opciones: Morir y dejarte en paz o callar lo que pasó y seguir viva-dijo y la miré confundida.
-Pero... Tu me donaste tus pulmones- dije y ella negó. Ahora estaba más que confundida.
-Yo no te di mis pulmones, yo hice el papel de haberlos dado y morir después-dijo y la miré confusa-hija, tu no tienes mis pulmones, tu tenías un transplante mucho antes de que yo llegara a ofrecer los míos, pero Karen me dijo que te haría creer que yo iba a donartelos para que dejaras de odiarme.
-Mamá, nunca te odié-dije y me reí-lo único que me molestó fue que me olvidaste sin saber si seguía con vida o no, y luego apareciste casi 3 años después con la noticia de que ibas a darme tus pulmones.
-¿No me odiaba antes?-preguntó con sus ojos cristalizados.
-Nunca lo hice.
Mi madre me abrazó y pude sentir como mi camisa comenzaba a mojarse con sus lágrimas, la tranquilicé y luego le pedí que entrara, comenzaba a hacer frío y me preocupaba que se pudiera enfermar. Supongo que todo lo que pasó tuvo algo bueno, Karen seguro perdió su empleo por falsificar papeles de donación.
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Friends with Beneficies | CAMREN
Fanfiction¿Te imaginas que después de 11 años de amistad con tu mejor amiga descubras que ella ha estado enamorada de ti? Esta es la historia de Camila Cabello, una joven que fue afectada por una terrible enfermedad de pulmón, luego de unos meses, recibió un...