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El día con Lauren fue increíble.

Cocinamos juntas, vimos una serie en Netflix, bailamos y comimos papas fritas.

-Tengo que irme-dijo levantándose de golpe.

-¿Porqué?-pregunté algo triste.

Lauren me sonrió y besó mi frente.

-Volveré en un rato-dijo tomando mi mejilla-tengo que buscar algunas cosas-dijo y se levantó.

-Lauren..-dije antes de que saliera-te amo-dije y me paré de la cama para besarla.

Ella me devolvió el beso y se fue.

Sentí que habían pasado horas desde que Lauren se había ido. En ese instante, mi celular timbró con un mensaje de Lauren.

Laur: Te amo mucho Camz, no lo olvides ❤️

Laur: Me voy

Sentí como un escalofrío recorrió mi cuerpo en cuanto leí ese mensaje.

Camz: Lauren, dónde mierda estás

Camz: LAUREN MICHELLE JAUREGUI MORGADO RESPONDE EL MALDITO MENSAJE.

Me percaté de que los mensajes no le llegaban y empecé a preocuparme más.

Comencé a llorar sobre la cama y tiré el celular a un lado de mi.

-Lauren...-dije entre sollozos.

Luego de eso, me dormí.

Y desperté porque el maldito sol estaba pegándome en toda la cara.

Apenas desperté, miré a mi alrededor buscando a Lauren.

Cuando me di cuenta, ella salió del baño con una toalla en su cuerpo y el cabello mojado.

-Buenos días, Prince...

Interrumpí las palabras de Lauren con un abrazo y sollozos.

-¿Dónde mierda estabas anoche?-pregunté molesta.

-Camila, te dije que iría a casa a recoger mis cosas-dijo sacándose la toalla del cabello.

-¿Y porque no me respondías?-dije.

-Porque se me fue la señal, Camz-dijo aburrida-¿Que pensabas?

Otra vez no.

-Lauren, ese último mensaje que me dejaste me asustó como no tienes idea-dije y busqué mi celular para mostrarle-¡Mira!

Ella miró los mensajes y su cara incrédula cambió inmediatamente de expresión.

-¿Estás bien?-pregunté e hice mi celular a un lado.

-Dios, ¿Porque tengo que hacer estas cosas?-se preguntó y fue a sentarse en la cama.

-Laur...

-Camz-me interrumpió-intenté acabar con mi vida.

-¡¿Lauren que mierda está pasando por tu cabeza?!-le grite molesta.

-Camila, no lo hice...

-Lauren, lo intentaste hacer y sabes que está mal-la regañé y me senté a su lado- los problemas que tienes con tu padre no tienen que afectarte de esa manera-dije intentando hacerla caer en razón-no es la solución.

-Camila, mi vida es un maldito asco-dijo soltando un suspiro-todo lo que hago es esforzarme y nadie me lo agradece-Okey, eso me ofendió un poco-a excepción de ti.

-Lauren, no tienes porque acabar con tus problemas y tú vida al mismo tiempo-le dije-solo morirás, pero solo piensa el daño que le harás a las personas que te quieren-le dije acariciando su espalda-piensa el daño que me haría a mí.

Ella volteó a mirarme y me abrazó.

-No volveré a hacerlo-dije entre sollozos-no quiero hacer que te sientas mal.

Aún no lograba entender la sensibilidad de Lauren estos días, ¡Ni siquiera me había besado!

Sabía que algo pasaba en su casa e iba a averiguarlo, pero claro que sí salía ahora a Lauren se le haría sospechoso y probablemente me seguiría.

Abracé a Lauren devuelta y le prometí que todo estaría bien.

Lauren no llevaba solo 5 minutos con esto, llevaba ya casi 2 días con su sensibilidad, y se me hacía bastante raro que se sincerara conmigo así como así. Lo que debía de pasar en su casa debía ser grave como para hacer que Lauren tuviera ataques de ansiedad.

-Camz, debo ir a casa a terminar de recoger mis cosas-dijo dejando de abrazarme-¡Sigo con la toalla puesta!-dijo y se levantó para vestirse.

-Yo voy contigo-dije para ir al baño a arreglarme, pero ella me detuvo.

-No es necesario-me dijo sonriendo.

-Si, lo es-dije soltándome de su agarre para ir a cambiarme.

Sabía que Lauren se iba a vestir rápido e iba a irse. Por suerte yo tenía otros planes.

Friends with Beneficies | CAMRENDonde viven las historias. Descúbrelo ahora