XLIV

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- Okay, llamaré.- Anuncié sentandome en la mesa.

Ya era el mediodía, luego de tomar ese chocolate caliente nos recostamos. No dormimos, solo nos quedamos hablando.

- ¡Adelante, preciosa!- Wade aplaudió emocionado sentándose sobre la mesa frente a mi.

Estaba usando su traje completo mientras balanceaba sus piernas mirándome marcar el número que estaba en la tarjeta. Decidió usar su traje "por si nos daba un buen contrato ahora", dudo que lo haga, pero de todas formas ya tenia un contrato para hoy. De uno de los bolsillos de su traje sacó un pequeño anotador y un crayón negro.

Llamé a Stan Smith y apoyé el celular sobre el lado de la nalga de Wade, el celular estaba en altavoz y mis brazos sirviendome de almohada.

- Buenos días, ¿con quien hablo?- Finalmente atendió Stan Smith.

- Conmigo.- Respondí.

- Y yo.- Habló Wade escribiendo mientras usaba sus muslos como escritorio.- ¡Hola, tipo de traje caro!

- Buenos días, Tear. Veo que ha hablado con él, gracias por eso.- Dijo Stan desde el otro lado de la línea.- Supongo que ya le ha comentado de este trabajo, ¿no?

- ¿Quien es Tear?- Pregunté fingiendo demencia observando a Wade, él me miraba con los ojos como platos.

- No tienen por qué preocuparse del anonimato, nadie va a pinchar esta línea.- Aseguró detrás de la línea.

- ¿Como estas tan seguro?- Preguntó Wade.- Es fácil interferir una llamada, hasta yo lo puedo hacer.

- No una llamada que me involucre.- Habló severo Stan.- ¿Alguna vez han oído esa teoría que asegura la existencia de personas con tanto dinero que se vuelven invisibles bajo el radar social?- Preguntó, pero ninguno respondió.- Bueno, aquí tienen a uno de esos.

- Carajo...- Murmuró Wade.

- ¿Tear, le ha comentado a Deadpool el trabajo?- Repitió su pregunta.

- Algo así.- Hablé.- En un mes y medio, en Las Vegas, cuatro días en el luxor con hospedaje y viaje pagos, ahi debemos encargarnos de los jefes de Pohon Ular, doscientos cincuenta grandes, pan comido.

- Exactamente.- Suspiró Stan.- Ustedes no tendrán que encargarse de la inteligencia, de eso nos encargamos nosotros.- Agregó.- Irán en uno de mis aviones privados, para asegurarnos de que lleguen, ¿correcto? El primer día se lo tomarán para descansar, necesito que estén despiertos para el día siguiente.- Hizo una pausa.- En la noche habrá una fiesta privada en el Golden Nugget, los cinco jefes de Pohon Ular estarán ahí.

Wade se inclinó acercando sus labios a mi mientras Stan Smith hablaba sobre Pohon Ular.

- Habla mucho...- Susurró.

- Lo sé.- Asentí en el mismo tono que él.

- Pero... Mucho.- Hizo énfasis en la última palabra, Stan no había dejado de hablar.- Oye, detente.- Wade lo interrumpió.

- Dígame.- Stan se detuvo.

- Hablas mucho.- Dijo Wilson enderezandose mientras tomaba mi celular.- Creo que sabes que a ninguno de los dos nos gusta hablar tanto sobre nuestros contratos, así que has un resumen de quince palabras o menos y te daré una estrella dorada.- Continuó jugando con el crayon en sus dedos.

- Está bien.- Suspiró con pesadez el hombre.- El dieciocho de tomarán un vuelo privado hasta Las Vegas y se hospedarán en el Luxor, el diecinueve en la noche deberán ir al Golden Nugget para interrumpir la fiesta de Pohon Ular y encargarse de sus jefes: Anurak, Daw, Kasem, Fern y Makok.- Wade escribía con rapidez lo que Stan decia.- Se tomarán un vuelo de vuelta el día veintiuno en la noche, el veinte lo tendrán libre. Nosotros nos encargamos de la inteligencia y amaremos un plan para ustedes, su trabajo va a ser nada más que el sucio.

Racha De Buena SuerteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora