La Sangre Que Nos Une

46:Una Vez En Diciembre

¿Es este el final del momento?

O simplemente el hermoso desarrollo

De un amor que nunca será... O quizá sí.

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******Safety Suit

Estaba siendo un beso lento, como una suave melodía... El corazón de Harry latía emocionado, era la primera vez que Hermione tomaba la iniciativa de besarlo.

Al separarse Hermione vio su reflejo en los ojos esmeraldas, que brillaban radiantes. Era como ver la profundidad del universo en aquella intensa mirada.

Entonces descubrió que las lágrimas que se habían acumulado en los ojos de Harry mientras hablaban, habían brotado durante el desarrollo del momento.

- Esto quiere decir que... ¿Me vas a dar una oportunidad? -titubeó esperanzado Harry, quien aún la mantenía entre sus brazos.

Hermione, que a los ojos verdes tenía un precioso rubor en las mejillas, soltó un suspiro. - Esto quiere decir que...-comenzó, y ponía sus manos sobre el rostro de Harry, cuyas pupilas se dilataron. - Vas a tener que esforzarte en demostrarme que no me estoy equivocando al dártela -concluyó, secándole el rocío que habían dejado las lágrimas en sus mejillas. Harry soltó una risita mientras empezaba a sonreír, sintiendo que el corazón, que si antes latió emocionado, ahora lo estaba haciendo lleno de felicidad. Tan inmensa que aún no podía asimilarla del todo. Tomaba una de las delicadas manos de Hermione y se la besaba en el dorso, en las mejillas de la chica aumentó el rubor.

- Pero tendrás que ser sincero con Ginny, no quiero que ella sufra -dijo inevitablemente la castaña, soltándose del agarre de Harry y bajando la mirada.

- Ron tenía razón -soltó una risilla irónica el ojiverde.

- Ron tenía razón... ¿En qué? -terció la castaña, arqueando una ceja.

- En que tendríamos remordimientos por ellos -respondió Harry, haciendo una mueca.

- Tú no los sientes. Al menos no por Draco -señaló escéptica Hermione.

- No, la verdad no -admitió Harry. - Porque le pediste un tiempo de separación.

- ¿Cómo...?-exclamó sorprendida Hermione, alejándose unos pasos de él. - Agrr... ¡Luna! -dedujo, volteando a ver peligrosa hacia las escaleras.

- ¿Pensabas no decírmelo? -terció aparentemente dolido Harry.

- ¡Eres un cínico! -sentenció Hermione. Harry la miró significativamente.

- Sí, es cierto que le pedí tiempo a Draco -reconoció la castaña. - Pero aun así, siento que lo estoy engañando- Bajaba la mirada una vez más.

- ¡No lo estás!... No realmente -subrayó el ojiverde.

- Por supuesto, lo dices para sentirte mejor. Porque tú sí estás traicionando a Ginny... ¡Eres su prometido! -ironizó Hermione, pero al mencionar lo último tuvo que admitir para sí misma que un pinchazo en el corazón la había lastimado.

- No -negó Harry.

- ¿Qué? -Los ojos marrones lo miraron confundidos.