Tangerine Oneshots (Bullet Train)

El "problema" con esa droga (T/N)*

Prólogo: Versión alternativa de si tú inhalabas aquel "polen"

Word count: 2027

Advertencia: droga sexual (?), menciones de juguete sexual (vibrador), dom!Tangerine, sub!lectora, humillación (? la rayis está desesperada), sexo oral, sexo sin protección, sexo vaginal, sexo anal, jalar el cabello, marcas, mordidas, fingering, masturbación, múltiples orgasmos, squirt, cockwarming.

Cuando Tangerine comenzó a pelear contra aquel tipo, por accidente te dieron un golpe y caíste al suelo junto al cargamento, y al intentar levantarte te apoyaste sobre los paquetes de droga justo cuando aquel hombre disparó.

Tangerine rápidamente se cubrió la boca y la nariz con la chaqueta de su traje, pero tu no alcanzaste a hacer lo mismo ya que los dispararos te tomaron por sorpresa.

Comenzaste a toser dando unos pasos hacías atrás aturdida, esparciendo el polvo en el aire con tu mano cuando otros disparos se escucharon y el tipo cayó muerto al suelo, mientras Lemon se les acercaba con una máscara en la boca.

–¿Los dos están bien?–Les preguntó quitando la máscara de su rostro una vez el polvo se disipó.–¿T/A estás bien?

–La pendeja inhaló esa mamada.–Se quejó acercándose al lado de Lemon donde te veían apoyada en una pared, tratando de recuperar el aire y viendo a tu alrededor confundida.

–¿Ahora qué hacemos? No sabemos qué efectos tiene esa mamada en las personas.–Dijo Lemon mientras Tangerine se acercaba para tomarte en sus brazos.

–¿Qué haces...?–Murmuraste confundida dejando tu brazo involuntariamente alrededor de su cuello.

–Encárgate del asunto, yo voy a llevar a T/A a su casa para asegurarme de que esté bien. Hablamos después.–Le dijo antes de comenzar a caminar contigo en sus brazos al coche en que llegaron.

–¿A dónde me llevas...?

–A tu hogar.–Te respondió abriendo la puerta para sentarte en el asiento del copiloto y abrochar tu cinturón.

Tangerine se dio la vuelta y se subió en el siento del conductor para encender el coche y comenzar a conducir hasta tu hogar.

Apoyaste el codo en la puerta mientras tenías tu mano en tú frente cubriendo tus ojos, a la vez que soltabas pequeños gruñidos y quejidos.

Tangerine frunció el ceño y te vio de reojo apretar tus piernas juntas con fuerza, y apretando tu mano en un puño.

Una vez aparcó el coche fuera de tu casa, comenzaste a intentar desabrochar el cinturón pero al estar tan desesperada te estaba costando.

–A ver, déjame ayudarte.–Te dijo tomando tú mano para alejarla, pero le diste un fuerte golpe en la suya.–¡¿Oye loca y a ti qué putas te pasa?!–Exclamó sobando su mano y viéndote con el ceño fruncido.

–No me toques puto baboso.–Gruñiste soltando tu cinturón, para luego bajarte rápidamente.

Sacaste tus llaves y con la desesperación que sentías lograste abrir rápidamente, dejando la puerta abierta.

Tangerine ni si quiera se molestó en preguntarte si le querías ahí, así que entró y vio como subías las escaleras con rapidez, recogiendo tus llaves del suelo.

Cerró la puerta y colgó su chaqueta en el perchero y las llaves en la puerta, para luego subir hasta tu habitación.

Acercó el oído a la puerta y te escuchó soltar gemidos y pequeños gruñidos, junto con el sonido de un vibrador funcionando.