Twenty Seven.

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—Emm… Y ese reloj? –Ella intentó buscar un tema de conversación mientras aparcaban el auto en el estacionamiento del edificio, además que verlo sacar esa reliquia desconocida de su bolsillo le causó mucha curiosidad—.

—Es de uno de los mocosos, otro más grande lo rompió y voy a repararlo –Dritte posó su vista también en el redondo metal dorado opaco en su diestra algo pensativo, tal vez fue algo precipitado comprometerse a algo así con un niño que a penas estaba viendo—.

—iSi necesitas algo extra lo pediré por internet! –La albina sonrió con emoción de que él estuviese haciendo un favor desinteresado a uno de los niños, ese era un paso más cerca a que lo dejaran en paz y pudiese rehabilitarse ganando su pase libre a Baviera, le había hablado sobre eso—.

Tras eso se encaminaron al elevador para marcar el último nivel, esperando con música ambiental los dos minutos que tardaron en abrirse las puertas metálicas en su pasillo.. no oyeron anda de ruido así que supusieron que los otros dos ya se habían ido.

Supusieron mal.

Pues al abrir la puerta se toparon con la sala ya ordenada pero con la mesita de centro llena de comida chatarra e Imperio acostado como moribundo en el sofá de dos plazas mirando la televisión, la de ojos cafés soltó un par de carcajadas en lo que el germano estaba a punto de lanzarlo por la ventana. Momentos después apareció el italiano con una toalla en la cabeza, olía mucho a lavanda por lo que era más que seguro que se había duchado en el baño de la habitación principal así que el azabache avanzó al sofá más cercano y tomó un cojín para comenzar a darle con este al otro europeo.

—Bene, preferisci che mi faccia una doccia o che puzzi come un ubriacone del centro come Empire?! –Reino se cubrió con sus brazos y luego comenzó a darle con la toalla al carmesí, Agatha volvió a reír yéndose a sentar junto al albino de franjas escarlata que movió sus pies para hacerle un lugar—.

(i¿Pues prefieres que me duche o que huela a borracho de centro como Imperio?!)

—Maldito imbécil.. —Gruñó entre dientes bajando el cojín, buscando con la vista a la menor hasta encontrarla en el sofá y señaló sus tacones que aún conservaba, se veían malditamente incómodos– ¿No te vas a cambiar esas cosas?

—En un rato, aquí está abrigado –Pudo apenas decir antes de que el de esmeraldas tomase su mano haciéndola levantarse con cuidado y jalándola un poco hasta su habitación donde la soltó y entró a su closet rebuscando quién sabe qué—.

Poco después este le entregó unas prendas y señaló el baño de la habitación desviando la mirada, la Richter parpadeó extrañada obedeciendo.. ¿En serio le estaba prestando ropa para que estuviese cómoda?, los zapatos en verdad eran dolorosos por el tiempo prolongado de uso así que comenzó a desvestirse tomando primero el suéter grande que cubría hasta casi diez centímetros por sobre sus rodillas y mirándose al espejo de al lado se sorprendió un poco cayendo en cuenta de que el de esvástica era realmente grande. Pero no quiso perder más el tiempo y tomó también la licra oscura que al parecer era deportiva por lo que a ella le quedó bastante bien, incluso le había dado calcetines por lo que colocó sus panties negras junto a su ropa doblada y abrió la puerta.

Dritte levantó la vista del reloj que estaba ya sobre el escritorio y le costó algunos segundos concentrar su vista en otra cosa, la más baja se acercó a donde se encontraba y se inclinó para darle un pequeño beso en la mejilla, él acarició embelesado su largo cabello níveo y juntó sus frentes cerrando los ojos. Ambos se atraían y gustaban, ni siquiera eran necesarias las palabras para decirlo pues todo estaba en sus miradas tranquilas.

• • •

—Я не думаo, что зто правилыно, за исклочением того, как вbI говорите, что Oн оTреагировал.. –Murmuró el de piel roja mirando a su amigo casi desparramado sobre uno de los sofás en la sala de la mansión berlinesa, aún no digería bien el asunto, además de ser la primera vez que le contaba algo como eso—.

(No creo que sea correcto, menos por como dices que reaccionó él..)

—No lo sé, Russland, ella realmente llama mi atención.. –Alemania resopló estirando su mano para volver a tomar su vaso con whiskey dándole un par de sorbos pequeños, tampoco era de los que ahogaban sus problemas en alcohol—.

—Hо идти на опаснуо почBу с твоим отчом для человеческой женшиньi? A идgел ее совсем недолго, и она кажется ближе K дриTTe.. –El eslavo lo miró con advertencia que reflejaban sus palabras, luego de todos los problemas que habían sucedido dudada que el ex fascista le tuviera algo de consideración como para renunciar a la chica—.

(¿Pero meterte en terreno peligroso con tu padre por una mujer humana?, sólo la vi poco tiempo y se ve más cercana a Dritte..)

—Esto es un asco, sólo seré más discreto y esperaré a que no me corte la cabeza. –De un solo sorbo el rubio secó el contenido del vaso y lo dejó sobre la mesita de centro que era incluso más antigua que su padre—.

“Esto va a resultar muy mal...”, fue lo que pensó Rusia con la vista aún puesta en su amigo desde la infancia.

—¿Cómo va el tema del señor URSS? –Volvió a hablar el tricolor, le habían dejado ese día libre y no tenía nada más que hacer, pues trabajar era lo único que sabía el muy miserable—.

—He проxодит и дня, чтобbI он Hе позвонил мне, чтобыI поруrаться, eго заставлят убирать мусор нa дoрorax, a он зто ненавидит –El mayor le dio un sorbo a su té frío, no le gustaba beber alcohol así que con algo tenía que acompañar al contrariado germano que casi no vivía más allá del trabajo—.

(No hay día en que no me llame para maldecir, lo hacen limpiar la basura de las autopistas y detesta eso)

—Ugh, si tan solo mi padre no hubiese roto el Eje Berlín Moscú.. –Sus ojos celestes miraron hacia el techo sin observar nada en realidad, tal vez si ese tratado no se rompía no lo hubiesen perdido todo a causa de la victoria soviética luego de la traición de su padre—.

—..yи не говори глупостей, они всerда ненавидели дрyr apyra. –Rusia lo miró mal y le dio otro sorbo a su taza para quitarse el mal sabor de boca que le producía recordar las guerras pasadas—.

(..Mejor sigue bebiendo y no digas tonterías, ellos siempre se odiaron.)

RUBRUM (T.R × Reader)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora