Every girls dream - Pablo Gavi

35- Año nuevo

Después de pasar dos días increíbles con Gavi y su familia había llegado el 31, el último día de este año tan increíble. La verdad es que si a principios de año me hubiesen dicho todo lo que mi vida ha cambiado, no me lo hubiese creído.

Lo primero y más increíble fue Pablo, el simple hecho de volver a pasar tiempo con él, había sido una de las mejores cosas que me habían ocurrido este año.
También había hecho nuevas amistades como Riqui y me había acercado más a las que ya tenía.
Otro highlight eran los viajes, todos lo que hice con la selección y también el de Formentera, que había sido de los mejores de mi vida.

En conclusión, un año de diez, que acabaría de la misma manera: después de tomar las uvas Pablo y yo saldríamos por Sevilla con Aurora, Javi y algunos amigos de los andaluces que ya conocía.

Pero empecemos por el principio, eran las doce de la mañana del 31 de diciembre, el día anterior habíamos ido a cenar con el grupo de amigos de Pablo, todos habían sido súper majos y nos lo estábamos pasando tan bien que se nos fue la hora y acabamos volviendo a las tres de la mañana.

- Pablito despierta- le susurro mientras le acaricio la parte de atrás de su cabeza.

- Que pasa?- dice con esa voz ronca que me mata.

- Ya es tarde, hay que bajar a desayunar-

- Baja tú, yo voy ahora- responde aún medio dormido con su cabeza apoyada en mi pecho.

- Vale, te espero abajo, pero no tardes-

- Mhm-

- Pablo es enserio- le digo.

- Que si pesada, que ya bajo ahora-

- Vale vale- digo saliendo de su habitación.

Cuando bajo me dirijo al salón donde me encuentro a Aurora con su padre viendo la tele, ambos están ya listos y bastante despiertos, al contrario que yo.

- Buenos días- saludo.

- Os acabáis de despertar aún ahora?- ríe Aurora.

- Yo si, Pablo sigue dormitando...- rio también.

- Hay que ver con este chaval, ni a los 17 se levanta a la primera- comenta gracioso su padre.

- Bueno Oli, te estamos entreteniendo, vete a desayunar que debes estar hambrienta- me dice Aurora.

- Vale, ahora os veo- me despido.

Entro en la cocina, me preparo un tazón de leche con chococrispies y me siento a tomarlo en los taburetes de la isla, tiempo después llega Rosa con las bolsas de la compra y yo me acerco a ayudarla.

- Buenos días cariño- me saluda la andaluza.

- Buenos días Rosa, te ayudo con las bolsas?- pregunto.

- No te preocupes mi niña, ya lo hago yo-

- Insisto, te ayudo que lo hacemos más rápido-

- Eres un amor Oli, no hace falta-

Pronto colocamos todo en su sitio y charlo un ratito con ella sobre la cena y todo.

- Y Pablo todavía no ha bajado?- me pregunta.

- No, me dijo que bajaba en cinco minutos pero han pasado veinte y sigue arriba- rio yo.

- Pues voy a darle un poco de caña, bajo ahora- me informa y pronto escucho a Pablo quejarse.

- Mamá que ya bajaba ahora!-

- No Pablo Martín, está Olivia esperando por ti! Así que baja ahora mismo!-