El Deseo Del Saber

Capítulo 44 : Abismo

Años después de la aniquilación total del reino de Innenstadt, el paisaje en vez de resurgir de las cenizas tras aquella masacre, ahora tan solo seguía siendo un páramo de soledad el cual con el pasar del tiempo seguía sumergiéndose más en la oscuridad, las vidas que se perdieron en ese lugar, la agonía que tuvieron que pasar los habitantes y el infierno que fueron sus últimos momentos, nada de eso podrá ser corregido jamás y, sin embargo, después de cinco largos años, una vez más este lugar seria relevante para iniciar el nuevo amanecer.

—El poder que emanan las Líneas de Ley en este lugar es abrumador. Este fue uno de los dos puntos de interés más importantes en el plan de mi hermano, no obstante, aún no veo por qué tengo que estar aquí.

El más experimentado de los Pilares rodeo toda la zona en busca de algo extraño o interesante, pero solo yacían las cenizas de lo que alguna vez fue.

—Hay algo en este lugar que me incomoda, es como si alguien estuviera...

—¿Observándote?

Rápidamente Rein, se dio media vuelta y vio a un joven de alrededor de veinte años frente a él, no dudo en lanzarse al ataque.

—Eres muy rápido y fuerte para ser alguien mayor, sin embargo, no me llegas a los talones siquiera.

El Pilar retrocedió lo más rápido que pudo y envaino su espada al notar que aquel misterioso joven no buscaba enfrentarlo.

—Haces bien en no atacar de nueva cuenta, Rein Hohenheim. Veo que estas un poco perdido en este lugar, tu hermano te mando a este sitio para que sus enemigos cayeran en su trampa, tan solo tienes que esperar a que ellos lleguen, las Líneas de Ley y su asombroso poder harán el resto del trabajo.

El experimentado hombre se acercó lo suficiente al joven y le pregunto.

—¿Quién eres exactamente? ¿Por qué me dices todo esto y que ganas al hacerlo?

El joven se acercó más a él y cerro ambos ojos antes de decir alguna palabra.

—Aria, te dije que no era necesaria tu intervención.

A espaldas del Pilar una joven mujer se hizo presente.

—Siento desobedecerte hermano, pero la espera me mata y ver a este hombre solo, perdido, engañado, tan solo hace que quiera despertarlo de alguna manera.

Ambos hermanos se observaron a los ojos por un breve momento, hasta que finalmente se calmaron y volvieron a dirigirse hacia Rein.

—Volviendo a tu pregunta, mi nombre es Arima, solo eso. No gano absolutamente nada con decirte esto, tan solo acelero el proceso de tu objetivo, no soy tu enemigo, pero si osas meterte conmigo sufrirás las consecuencias.

Aun reacio a creer en las palabras del chico, dio un largo suspiro y empezó a reírse a carcajadas.

—Y que les hace pensar que me creeré todas esas estupideces.

En un solo parpadeo ambos hermanos se encontraban con sus respectivas armas en el cuello de Hohenheim.

—Juegas mucho con tu suerte, lastimosamente no estamos autorizados a asesinarte, tienes un papel más grande que cumplir y nosotros no actuaremos hasta que nuestra líder aparezca, hasta entonces, espero que sigas con vida.

Tras mencionar aquellas últimas palabras, ambos hermanos se esfumaron del lugar sin dejar rastro alguno.

—Parece qué hay algo más grande sucediendo en las sombras, me preguntó si Han sabrá algo al respecto.