Capítulo 10 : Die Königreiche des Ostens

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PARTE 2 – EL NUEVO MUNDO

Año 325.

—¡Despierta... despierta! Alissa, te necesito. Algo ha pasado.

~

Hacia el este cruzando el "Mar de Luna" en un continente supuestamente desconocido para el oeste del planeta.

En él yacía un reino en el norte el cual tenía por nombre "Nordstadt" en él vivía una joven de 18 años llamada Alissa y su padre el heredero al trono no tardaría demasiado tiempo en ascender a él.

Aun cuando la ciudad no era muy grande y no poseía tanta hegemonía, si era respetado por los pequeños reinos colindantes del norte por ser uno de los tres más fuertes.

Alissa era una chica con un cuerpo muy atlético y aunque destacaba mucho en la multitud por ser nieta del rey, esa no era la razón por la cual lo hacía. Principalmente lo hacía debido a que era una de las mujeres más bellas del reino. Sus inexpresivos ojos de color avellana; su boca tan fina como la seda; su cuello tan elegante y su color de cabello castaño que siempre lo llevaba rizado eran una de las muchas cualidades que esta poseía. Sin contar que es una de las chicas más fuertes y con uno de los cuerpos más esbeltos del reino.

A pesar de todo eso, la vestimenta que solía llevar no era muy elegante debido a que no era de su agrado el usar dicha ropa, mayormente porque no le gustaba involucrarse demasiado en los asuntos del reino.

El llamado continente desconocido por los habitantes del oeste, llevaba muchos años planeando una alianza entre los 3 grandes reinos, sin embargo, las cosas nunca sucedían como uno quiere y tras años de intentos fallidos la guerra devastó en su totalidad a todos los participantes. Tras años de lucha la batalla llegó a su fin, pero a un costo muy alto.

~

Exaltada la joven de pelo castaño despertó de una forma muy repentina. Volteo a los alrededores y se quedó quieta por un breve momento.

Tras varios minutos de reposo se percató de que alguien llamaba a la puerta y se levantó a atenderla.

—En mi sueño alguien me llama, se encontraba sufriendo y yo simplemente no podía moverme. Se sintió tan real que hasta mis vellos se erizan cada vez que lo recuerdo.

Al lado de ella su mejor amiga se encontraba sentada en la orilla de su cama escuchando el sueño que tuvo.

Su amiga se llamaba Annie. Era una chica delgada y no solía destacar mucho ya que su altura le acomplejaba. Tenía un pelo tan oscuro como la noche más fría del invierno, su cabello era corto y siempre lo tenía bastante liso. Sus ojos eran pequeños y de un color marrón bastante oscuro. Vestía con una ropa de color muy opaca. Aunque su aspecto mostraba mucha alegría y felicidad en su vida.

—Vaya que te encuentras un poco afectada sin embargo no es momento de ponerse así, además solo fue un sueño. Cambiando de tema se nota que has crecido desde la última vez que nos vimos, ahora me ganas por cinco centímetros. Eso no es justo.

Un poco sorprendida por el comentario tan gracioso Alissa soltó una carcajada.

—Lo dijiste en un tono tan serio que no pude contener la risa.

La amiga la observo molesta, pero al final se rio junto con ella.

—Ya, ya. Ahora que lo pienso falta muy poco para la ceremonia de coronación de tu padre. Supongo que has de estar feliz por él.

La chica de pelo castaño desvío la mirada y se quedó en un completo e incómodo silencio.

—Supongo que no quieres hablar de eso. Muy bien, no te molestare de nuevo con ese tema. Ahora me tengo que ir, voy a ir a ayudarle a mi madre con unos asuntos.

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