Un Cuento Para Mike.

Capítulo 42

Sunni llamó a Namjoon, ya que al ver a Jungkook a través del portal quería saber cómo estaban sus hijos.

—¿Cómo está todo por allá?—preguntó Sunni.

—Aunque no pueda ver mucho por toda la niebla todo marcha bien, logramos calmar a la mayor parte de la gente aquí en la plaza central, todos están muy contentos por la noticia de que tenemos aliados en el cielo.

—¡¿Qué demonios haces ahí?! ¡¿Con quién más estás?!

—Antes de que te molestes mamá yo y Yoongi le pedimos a Mina que nos dejara salir para ayudar, estamos acompañados por Jin y Jimin, además no nos hemos arriesgado mucho, todo está bien.

—¿Taehyung está contigo?

—No, debe estar en el palacio con los demás.

—A lo mejor sí, pero Jungkook no está en ahí, él está con Jesucristo en la tierra de los originales, lo vi cuando abrieron un portal.

—Entiendo, deberías de llamar a Mina, quizás ella te diga dónde está.

—Lo haré Namjoon, cuidate y cuida a tu hermano, si algo pasa salgan de ahí.

—Cuidate tu también mamá.

Sunni llamó a Mina, quien ya sabía de la alianza, le contó donde estaba Jungkook y Mina le dijo que todo estaba bien, pero Chaeyoung no mejoraba aunque le hayan extraído todo el veneno, Sunni preguntó por Taehyung, pero su Nana no sabía nada, aunque le dijo que Lilith había salido, ya que acompañaría a Uriel, talvez el joven la acompañó y luego fue a otro lado.

—Supongo que así debe ser Mina—dijo Sunni.

—Yo también creo eso, si tengo otra noticia te avisare, si sabes algo más me lo dices, yo seguiré cuidando a Chaeyoung e iniciaré un hechizo para ver todo el infierno, necesito saber donde está Taehyung.

Sunni colgó y Mina volvió a la sala, donde estaba la joven quien estaba despierta, pero cansada, y pudo ver a todos sentados a su alrededor.

—Creo que las cosas no están nada bien allá afuera—dijo Chaeyoung en voz baja, agarrando la mano de Beomgyu.

—Algo así, pero las cosas mejorarán, ustedes volverán a la tierra, donde vivirán una vida normal, hasta podrán estudiar como humanos y cumplir sus sueños—dijo Mina sonriendo—debo de hacer algo, estare arriba, si necesitan algo llámenme.

Mina comenzó a buscar a Taehyung, primero dió un vistazo al jardín, pero no había ni un solo rastro de él y continuó su búsqueda en otros lugares.

Mientras eso ocurría kai convenció a sus soldados de ayudar en la tierra superficial, los demás descendientes de los demonios originales no estaban de acuerdo incluyendo a su familia, pero eso a él no le importo, abrió portales rumbo a la tierra, las tropas lo obedecieron y fueron a ese lugar.

La niebla cada vez era más densa, pero aún se distinguían las luces de la vía, Taehyung había pasado casi dos horas buscando a Dios en el cielo, ya era la 1:00 de la madrugada del 2 de diciembre.

En la tierra el evento del eclipse ya había pasado, para todos fue hermoso, pero la noche aún no terminaba, ya que había sido hecha para ser memorable.

—¿Dónde diablos está?—se preguntaba asi mismo Taehyung.

—¡Al fin me encontraste!—dijo Dios golpeándolo en la cabeza.

—¡Auch!—exclamó de dolor—¡¿pero que te pasa?!

—¡Nada!, creías que no me daría cuenta de lo que hacían, otra vez quieren acabar con mi guerra, es que acaso Jesucristo no recuerda lo dicho por mí cuando lo tenía secuestrado.