Dos años pasaron de lo ocurrido en del templo guanyln.
Jingyi vive ignorando los intentos de su padre en acercase al él, mientras que jin ling se disgusta al ver dicha interacción de padre e hijo ya que su primo tiene el placer de por lo menos tene...
Para el líder jiang, tener constantemente a su esposo prácticamente pegado a su lado es algo a lo cual ya está acostumbrado pero eso es diferente a tenerlo pegado a su lado preguntando cada cinco minutos, que si necesitaba algo, si había algo que me molestaba, si el bebé se encuentra bien, si la pose que tiene es cómoda para luego sacarme el cojín aplástalo para poder devolverlo y en cinco minutos después vuelve a repetir la acción.
Al principio fue lindo tener a su esposo atento a todo por él y por el bebe, pero con el pasar de las horas y días se volvió bastante molesto y no es que lo odio pero es que se volvió bastante ahogado. Lo único que pide jiang cheng es paz por unos hora, pero quien le hace entender eso al lan, nadie porque no oirá ninguna palabra que no sea del médico al cargo. Aun así para xichen entra por una oreja y sale por la otra, wen qing tampoco lo tiene fácil, cuando el lan no está detrás de su esposo está detrás de ella como un niño de 5 años que no para de preguntar, más de una vez tuvo que amenazarlo con sus agujas.
Este día apenas había comenzado, y para Jiang cheng ya era agotador —A-huan no tienes que hacer esto— se oía casado.
Soltando los cojines, lan xichen lo toma de sus manos —A-cheng ¿Está bien? ¿Estas casando? porque no tomas un descalzo y duermes por unas horas.
Jiang cheng frunce el ceño —¿Qué diablos dice? no estoy cansado, me desperté hace una hora.
—Aun así, leí que el embarazo puede cansarte mucho.
Jiang cheng libera sus manos —Falta para eso, ¿No tienes otro cosa que hacer?— niega con la cabeza —¿En serio?— el lan asiente, jiang cheng vuelve a soltar su suspiro —Hace tres días que robaron el sello de tigre estigio ¿Tu hermano o el tío, no se comunicaron contigo?.
Xichen parece pensarlo —Llegaron algunas cartas de gusu, pero aun no las he abierto.
Jiang cheng lo mira con los ojos abiertos y la boca casi abierta hasta el suelo, para segundos después fruncir el ceño y apretar los puños — Lan.Xi.chen— dice apretando los dientes —¿¡Y qué estás esperando!? esas cartas no se abrirán y leerán sola, ¡Ve a cumplir tu deber de líder! ¡AHORA!— sentenció con zidia en mano.
Para el lan por mucho que quiera negarse y quedar al lado de su esposo, sabe que la mirada de este es un "VETE". Resinado decide obedecerlo por el momento —Está bien, me aseguraré de terminar lo más rápido posible.
—Tomate tu...— xichen abandonó la oficina —...Tiempo— suelta al aire.
A pesar que son esposos y comparten oficina esta vez, Jiang Cheng decidió mover del lugar los papeles y tinta del lan. Por mucho que apreciara su compañía justa ahora lo quería lejos, aunque sea por unas horas.
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Mientras tanto en gusu toda la secta lan se encuentran de cabeza por la llegada de cierto joven, los ancianos tratan de mantener el orden del lugar sin embargo la presencia del patriarca yiling tampoco es de gran ayuda.
