Una vieja amistad, 17 años sin verse, un reencuentro inesperado.
Sus vidas habían cambiado, ya no eran aquellos chiquillos de ocho y diez años, ya no se dejaban humillar por nadie, ya habían madurado y encontrado su camino.
¿Pero qué pasa cuando s...
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A las cinco en punto Hunter me deja en el club y se va asegurándome que va a intentar hacer todo lo más rápido posible, y pidiéndome que me divierta con las chicas, tras un beso fugaz en mi boca, que no me esperaba, se vuelve a subir a la camioneta dejándome allí, mirando como desaparece de mi vista.
-¡Cuñada! – Me grita Harper y viene rápido hacia mí para abrazarme con fuerzas, desde que supo que los chicos son sus hermanos me llama así, aunque sabe que Hunter y yo no estamos juntos - ¿Cómo les fue? – me pregunta bajando el tono de su voz.
-Súper bien digo sonriendo, el doctor nos dijo que todo está bien, y escuchamos el corazoncito – digo enamorada de ese sonido.
-¡Ay qué lindo! ¡Quiero que me muestres! – Me pide y yo asiento con mi cabeza.
-Supongo que tengo un rato para estar acá, así que te lo mostraré, ¿Qué planea tu hermano?
-Lo siento cuñadita – me dice enlazando su brazo con el mío, para comenzar a dirigirme dentro del club – Pero no te lo diré, solo sé que te va a encantar y que si le dice que no te golpearé, pero cuando mi sobrinito nazca – yo río por lo que dice y le saco la lengua.
-Tu hermano me dijo que tenía que decirle que sí, ¡pero no sé a qué!
-Pues ya te vas a enterar, aunque si piensas un poquito estoy más que segura que te vas a dar cuenta – dice poniendo sus ojos en blanco, pero yo no tengo ni idea de qué me habla, por lo que bufo frustrada.
-Hola Oli – me saluda feliz Anne con un abrazo y un beso, detrás de ella está Sky quien también me saluda.
-¿Merendaste?
-Sí, fuimos a merendar con Hunty antes de venir.
-¡Tan atento mi hermanito! – dice soñadora Harper y yo río.
-¡Deja de idolatrar a tus hermanos! – la regaña Sky.
-¡Ya sé! Vas a querer un chico perfecto como ellos dos – dice con una falsa mirada de soñadora Anne.
-¡Dejen de molestar a mi pequeñita! – las regaño mientras abrazo por los hombros a Harper.
-Aún no pienso en hombres, creo que primero tengo que sanar yo – suspira, y a mí se me rompe el corazón, debería estar pensando en chicos y en salir de fiestas, no en sanarse.
-Hola Oli – me saluda un sonriente Cayden, noto como Harper bufa y se separa de mí, mientras Cayden se acerca y me da un caluroso abrazo - ¿Estás lista para la sorpresa?
-Hola Cay, tú sí me dirás de que va todo esto, ¿verdad?
-No, lo siento, pero quiero mantener mis pelotas en su lugar – me dice y yo río por su expresión.
