Miércoles 27 de septiembre.
"No era necesario"
"Ya lo sabía desde el principio"
"No tienes que meterte en problemas por mí, todo saldrá bien"
Esas fueron las palabras de Rengoku cuando me presenté en su casa al día siguiente de absorber toda la información que había encontrado en aquel ordenador.
Y efectivamente.
Él sabía que mi madre iba a ser la abogada de la defensa.
En su caso entiendo que no me contara este detalle.
Probablemente me hubiese puesto igual que cuando me lo contó papá.
Aun así, el haberme enterado de otra persona no evitó que me pusiera a llorar como un bebé.
Quiero creer que era toda la tensión, tristeza, frustración y probablemente esa sensación de impotencia que sigo arrastrando aún a día de hoy y que no fui capaz de dejar en los brazos de mi novio que me consoló aquella tarde como tantas veces atrás.
Os contaría que tal fue el resto de las vacaciones y el inicio del segundo trimestre.
Pero llevo cerca de un mes en una burbuja aislada del mundo exterior.
Mentalmente me refiero.
Tal y como advirtió papá hubo muchos susurros y comentarios cada cual más absurdo.
Lo único bueno es que Daki ha cerrado el hocico al menos de momento, por lo visto ahora no le interesa que sepan sobre su interés por nuestro profesor.
Mis amigos claramente han notado que si ahora mismo respiro es porque lo hago inconscientemente , si de por sí siempre he sido dispersa y despistada últimamente es que ni participó en las conversaciones.
Hasta Inosuke me ha apoyado y me ha intentado animar buscando cabrearme para que peleemos como siempre, pero es que mi mente está en otro lado.
Sobre todo hoy.
Hoy era el día tan esperado.
Al no ir Rengoku a clase esos susurros fueron más agobiantes a pesar de intentar permanecer en mi mundo interior hasta que esta fecha pasara , y todo se solucionara.
Pero hasta para mi fue difícil.
No sé cómo no me fui a mitad de las clases.
Bueno en realidad sí que lo sé.
Este mes estoy con mamá.
Ir a casa hoy significa que no habrá nadie.
Mi padre me dejó caer que este día aunque sea que la pase con ellos, pero como seré cabezota hasta la muerte me negué.
Inosuke y Zenitsu quisieron también quedarse un rato conmigo cuando me dejaron en casa después de las clases.
Sin embargo también les negué su compañia.
Quería engañar a todos y fingir que no me estaba afectando tanto como realmente era.
Quería mantenerme lejos de todos para que no se me escapara nada sospechoso sobre mi relación con Rengoku.
Quería ser fuerte y demostrarme que lo que hoy estaba pasando era solo un mero trámite que iba a salir bien.
Que tenía que salir bien.
Pero en cuanto me quedé sola con mis pensamientos y preocupaciones la casa se me vino encima.
Todo esto sé que puede sonar exagerado, pero ¿A quién no le preocuparía?
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Lo que un profesor N̶o̶ debe hacer ( Rengoku x Oc)
FanfictionEn el centro de secundaria obligatoria Kimetsu no había estudiante que no conociera al profesor de historia Rengoku Kyojuro. Desde los de primero hasta los de tercer grado eran conocedores de cuánto amaba su profesión con solo ver entrega con sus a...