Capítulo 11 : Ser más que un profesor

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Las piernas me temblaban, no sabía cómo podía mantenerme de pie allí delante de la puerta de la sala de profesores.

Había pasado las últimas tres horas al borde un ataque de ansiedad , que cómo todo traté de disimular lo mejor que pude.

Momentos cómo estos eran en los que odiaba a Rengoku más que a nada, él sabe de más lo que provoca y aun así me tortura haciéndome esperar para lo que sea que tenga que decirme, a mí, una persona con menos cero de paciencia.

Y ahora había que hacer lo que mejor se me daba últimamente , respirar profundo e intentar dejar de pensar, era la única forma que había descubierto para que mi cuerpo reaccionará de nuevo.

—Con permiso—

Sin pensarlo más golpee la puerta y entre.

Para variar solo parecía que estuviese allí Rengoku , y esto no sabía si me tranquilizaba o me ponía más nerviosa.

—¡Tachibana! Al fin estás aquí, antes no te pregunté ,pero ¿Ya te encuentras mejor? Ha tenido que ser algo grave para que alguien cómo tú faltara—

¿Esto es coña? ¿Enserio él me está preguntando que me ha ocurrido? Y ¿Con esa estúpida tranquilidad y naturalidad cómo si no hubiese pasado nada?

Y así señoras y señores es cómo consigue que se esfume cualquier rastro de inquietud o nerviosismo por mi parte , y hace que me empiece a hervir la sangre.

—Sí , pero como ves ya estoy bien. Nada que un día en casa no arregle , no hacía falta que te preocuparas—

Intento mantener la calma, pero al dejar la carpeta encima de su mesa se podría decir que la suelto con algo de ,cómo decirlo; ira y resentimiento.

Y está resuena en aquella aula haciendo bastante ruido y que todo el papel que estaba haciendo mi querido profesor desaparezca mirándome con más seriedad.

—Sabes que no quise decir lo que dije el otro día , yo sé que tú no eres así. Mi comportamiento estuvo totalmente fuera de lugar y tras pensarlo mucho he decidido que esto no puede seguir así—

Y sin más se acabó.

Así de simple y con toda la tranquilidad del mundo mientras me mira fijamente a los ojos me dice que no podemos seguir así.

Yo ni siquiera puedo responderle, siento un nudo en la garganta que no me lo permite y si no fuera por todo lo que llore ayer ahora sería un mar de lágrimas, así que al menos no le voy a dar el gusto de verme llorar , aunque ganas no me faltan.

Y estaba por salir de allí , pero como siempre , pareciendo que adivinara mis pensamientos su voz frena todos mis planes.

—¿Conoces Otaru?—

¿Qué?

—Em si lo conozco ,aunque no he ido nunca ¿A qué viene esto ahora?—

Tuve que aclararme la garganta para responder ósea me deja ,por así decirlo, y ¿Ahora me habla de lugares turísticos?

—Vamos a ir, hoy. Hay una cafetería que me gustaría mostrarte así que nos veremos allí, la hora y la ubicación después te las paso por whatsapp , espero que no te importe que haya agarrado el número de tu carnet—

—Espera espera... No entiendo nada, acabas de decirme que no quieres seguir con lo que sea esto y ¿Ahora esperas que vaya contigo a merendar? y ¿Cómo sabes que ese es mi número? Podría ser el de mi madre o peor aun , el de mi padre—

—Yo no he dicho eso, te he dicho que no podemos seguir así , por eso vamos a ir a "merendar" para hablar mejor las cosas, y ya puestos a más sitios ya que no has ido nunca. Y Tachibana si aún estuvieras en primero o segundo de educación básica podría pensar que es el de alguno de tus padres, pero te olvidas que yo también fui estudiante y sé qué a partir de una edad no queremos que nuestros padres se metan y todos ponéis vuestros números—

Lo que un profesor N̶o̶ debe hacer ( Rengoku x Oc) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora