Lagrimas de Margaritas

Capitulo 16. Crueldad

Al despertar pude ver que ya era de noche. — "¿Cuántas horas dormí?" — Me levante de la cama, salí del cuarto y empecé a caminar por la casa que se encontraba en total silencio. Baje a la primera planta, la única zona iluminada era la cocina y al acercarme pude ver que en la estufa había un plato de crema de judías con unos cuantos crutones de ajo encima, ya estaba frío. — Esto es comida... o ¿cena? — Mi estomago empezó a contraerse del hambre, así que tome el plato, abrí el microondas para después poner adentro el plato y calcular el tiempo que se calentaría.

Me recargue en el borde de la barra con los brazos cruzados mirando un punto fijo y recordando todos los hechos de esta mañana... No fui lo mas agradable con el doctor, tengo que disculparme la siguiente vez que lo vea. El hecho de que hablara como si supiera como me siento y que todo lo que tenía que hacer era pan comido me fastidiaba mucho, ¿Es que acaso no estudio para saber que esto no es de un día a otro?
El timbre del microondas me saco de mis pensamientos, saque el platillo de su interior y me senté en el comedor para empezar a comer.

— "Una cucharada. Extraña, viscosa y difícil de pasar.
Dos cucharadas. Agría y de sabor fuerte, pasable apenas.
Tres cucharadas. Agridulce.
Cuatro cucharadas. Pasable y de sabor fuerte.
Cinco cucharadas. Algo mas suave y fácil de pasar por la garganta." —
Así pase contando cucharadas, conforme iban mas bocados pasando por mi boca me sentía algo mas tranquila y pude llegar a la mitad de mi comida sorprendentemente. En ocasiones sentía que quería escupir, pero el hambre era mucha y me estaba irritando tener el estomago vacío, por lo que hice que mi garganta lo pasara casi a fuerzas.
Una vez que la sensación de contracción en mi estomago paro yo pare de comer, contemple mi comida que estaba un poco menos de la mitad de la crema. — Es un buen logro, supongo. — Agarre el plato y lo lleve al fregadero, subí hasta mi cuarto y me encerré allí, ya había dormido lo suficiente por lo que tome mi teléfono y empecé a revisar lo nuevo de este mes.

— "Ahora que lo pienso, ¿Cuál era el juguete que Nicole quería para navidad?" — Me metí en la aplicación de Google, pero antes de que ingresara el titulo de búsqueda observe la barra de foros de noticias y una de ellas... Estaba mi nombre. — "¿Tan rápido se extendió la noticia?" — Di clic en el enlace que me llevo al foro.
—Mujer de 29 años es secuestrada después de ir a un bar lujoso.—
"El pasado 18 de noviembre de este año se reporto la desaparición de Daisy Sentry de casi 30 años. La victima fue vista por ultima vez en el reconocido LuXurios Bar y se reporto su desaparición un día después, el 19 de noviembre.
Testigos afirmaban haber visto a la mujer salir del bar en estado de embriaguez junto a un hombre cerca de la una de la madrugada y que ambos se fueron en el coche de el.
Su hermano el Oficial de policía, Rafael Sentry no a dado declaraciones de su paradero o acerca del perpetrador.
¿Acaso esto se trata de un criminal en serie o solo una mujer muy descuidada?"

¿Qué carajos con esta nota? ¿Si quiera trataron investigar mas de mi caso? Tengo 31 años, yo desaparecí cerca de las 11 pm y mi auto seguía en el estacionamiento del bar. ¿Mujer muy descuidada? Es que acaso no entiende... ¡A mi me violaron! ¿Y de alguna forma yo soy la descuidada?

Baje hasta la sección de comentarios y se puso peor...
— Dicen que ella iba ese día con un vestido muy llamativo, no me extraña que haya atraído miradas. —
— ¿Para que la gente va a un bar si al final terminan llorando? — 
— ¡Ay si! Muy seguramente la secuestraron, ha de ser su novio y su hermano ni enterado. —
— Pobre mujer, pero ya enserio ¿Qué esperaba encontrar ahí? Ya sabemos como son ese tipo de lugares, no veo por que no lo pensó antes. —
— Solo por que es la hermana de un policía ya la están rastreando, a una amiga mía apenas y los federales le hicieron caso cuando su hermanita desapareció. —
— ¿Habrá sido una dama de compañía? Sabemos que esa clase de trabajos requieren esos sacrificios. —